HOSPITAL MILITAR DE SEVILLA

«Lo primero que cambió la Junta en el Hospital Militar de Sevilla fue una farola y un naranjo»

El coronel Ángel Guerra, último administrador del centro hospitalario antes de su cierre y posterior abandono, recuerda que Trillo se deshizo de él «sin haberlo pisado» y que la Junta le dejó a deber 1.300 millones de pesetas

El coronel retirado Ángel Guerra fue gerente del Hospital Militar J.M.Serrano

Jesús Álvarez

«Sé que está destrozado y no quiero ir a verlo porque le tengo mucho cariño a ese hospital y me van a dar ganas de llorar», dice Ángel Guerra , coronel retirado que administró este centro desde 1999 hasta 2005, cuando pasó a manos de la Junta. Llegó a tener a más de 600 profesionales a su cargo, de los que más de 500 eran civiles.

¿Es verdad que era casi como un hotel de cinco estrellas?

Comparado con la sanidad que había en aquella época, era efectivamente como un hotel de lujo . Prácticamente todas sus habitaciones eran individuales y funcionaba a pleno rendimiento cuando lo cogió la Junta.

En 1992 era el hospital de referencia de los jefes de Estado y altas autoridades que venían a visitar la Exposición Universal, por encima del Virgen del Rocío.

Puedo decirle que también lo fue en unas maniobras internacionales de la OTAN en el Golfo de Cádiz , por delante del Hospital Militar de San Fernando, mucho más cercano.

¿Sólo atendía a personal militar y a sus familias?

Esos eran nuestros pacientes fijos por su cáracter militar, pero atendíamos a cualquier emergencia. Recuerdo que todos los heridos del hundimiento de la nave de Muebles Peralta vinieron aquí y los atendimos perfectamente. También recibíamos muchos enfermos del Virgen del Rocío, muchos de la UCI , y tuvimos que dejarlo porque el SAS dejó de pagarnos. Nos dejaron a deber unos 1.300 millones de pesetas de entonces. Les pedimos un gesto de buena voluntad al señor Vallejo, entonces consejero de Salud de la Junta de que pensaban pagarnos, pero no llegó esa señal.

También iban allí estudiantes de Medicina a formarse.

No sólo de Medicina, también de Enfermería. Se olvida con frecuencia que también era un hospital universitario y que teníamos también un área de investigación y de ensayos clínicos con animales, especialmente en el campo de las prótesis. Cuando se cerró el hospital, recuerdo que esos estudiantes de Medicina y Enfermería que estuvieron aquí nos dieron una despedida muy cariñosa. Nos dijeron que era el mejor sitio que había en Sevilla para formarse. Era fácil de comprender porque en los demás hospitales había muchos más pacientes y los médicos no podían atenderles como aquí.

¿Sabe por qué el Ministerio de Defensa se deshizo del hospital?

La persona que lo decidió fue Federico Trillo , entonces ministro de Defensa con el PP. Se desprendió prácticamente de todos los hospitales militares del Ejército de Tierra, manteniendo todos de la Armada, ya que había pertenecido a ese ejército y era diputado por Cartagena, donde estaba uno de sus hospitales . Trillo entregó esto sin ni siquiera haber pisado el hospital. Una pena. Es verdad que con la supresión de la mili bajó mucho el número de pacientes y que era necesario transformarlo,pero se podía haber buscado una fórmula.

¿Cómo cuál?

A Trillo le propusimos especializarlo en Traumatología, una de las especialidades-estrella del hospital y que atendiéramos a todos los accidentes laborales y de tráfico. En Traumatología se formarían esas especialidades médicas que el ejército estaba demandando. Teníamos grandes profesionales e hicimos una propuesta económica que valoró muy bien el interventor general de Defensa, pero Trillo decidió cederlo a la Junta.

Recuerda por qué la Junta se metió en una reforma tan importante estando el hospital en tan buenas condiciones?

Lo que recuerdo es que lo más urgente para la Junta era adaptar una zona para Psiquiatría que precisamente nosotros acabábamos de reformar. Le pusieron pegas a las dimensiones de los pasillos, no sé si los ampliaron en diez centímetros, de 1,50 a 1,60. La calle de entrada de esa zona con la acera adornada con naranjos y farolas se desmanteló y volvieron a poner lo mismo con farolas más modernas, dando sensación de poco ahorro economico. Recuerdo también que los sindicatos hacían huelga todos los jueves para que el personal pasara al SAS porque se rumoreaba que lo iba a comprar la empresa del Sagrado Corazón.

«Teníamos grandes médicos que se desperdiciaron. Algunos acabaron en el botiquín de un cuartel»

¿Qué pasó con los médicos militares que trabajan aquí, la mayoría con una gran experiencia?

El personal civil de enfermería médicos enfermeros y auxiliares de enfermería fue integrado en el SAS el resto se distribuyeron casi todos entre los acuartelamientos de la plaza. El militar que pudo pasó a reserva otros destinados en otros hospitales principalmente , el San Fernando. Al cierre del mismo han pasado prácticamente a los botiquines de los acuartelamientos, un desperdicio de grandes especialistas.

.

Comentarios
0
Comparte esta noticia por correo electrónico

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Reporta un error en esta noticia

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Muchas gracias por tu participación