La marcha de Segarra a Madrid abre la batalla por la Fiscalía de Sevilla

La plaza que deja María José Segarra para marcharse a la Fiscalía General del Estado no es un destino cualquiera. No sólo por la dimensión sino por lo complicado del trabajo. En la Audiencia hay actualmente 32 macrocausas (casi todas por corrupción) a las que se suman otros importantes procedimientos por drogas, asesinatos y juicios por abusos sexuales.

Si a eso se une una plantilla de noventa fiscales con pocos medios. y con una oficina fiscal que, pese a que fue presentada hace meses, sigue con graves carencias, la elección de la persona que estará al mando no es una tontería. Por ello la marcha de Segarra deja una sensación de orfandad entre sus compañeros , acostumbrados desde hace 14 años a una mujer con gran capacidad, que daba órdenes sin parecerlo y «diligente al máximo». Pero el proceso de sucesión que se abre ahora puede tardar semanas. Primero, tiene que culminar la designación de Segarra ya que, hasta que no pase por el CGPJ, por el Congreso y se publique en el BOE, no será oficialmente fiscal general.

Una vez que eso ocurra, es necesario abrir un período para que se convoque la plaza, que se presenten los candidatos y que lo vote el Consejo Fiscal, aunque la última palabra la tiene la Fiscalía General del Estado. Al final, será la propia Segarra la que designe a la persona que le sucederá. Ayer, tras hacerse oficial su designación, aseguró que es pronto para hablar de ello pero afirmó que hay fiscales «sobradamente preparados» para ocupar su puesto.

Entretanto la teniente fiscal, Dolores Villalonga se hará cargo en funciones de las tareas de la Fiscalía . Pero eso será sólo hasta que se resuelva el relevo.

Aunque aun es pronto, en las quinielas de la sucesión reaparece un nombre: Luis Fernández Arévalo, fiscal jefe de Huelva y que compitió con Segarra en 2015, suena con fuerza. Aunque Fernández Arévalo no ha desvelado aún si se presentará, se da por seguro que lo hará. Tiene curriculum (es de los más antiguos en el escalafón), conoce muy bien la plaza, es muy respetado, y está bien situado:está casado con una vocal del CGPJ y es íntimo del fiscal y exconsejero de Justicia, Emilio de Llera . En las últimas semanas fue noticia porque pidió el archivo en la investigación de los cursos de formación que se sigue en Huelva.

Mientras el fiscal de Seguridad Vial, Luis Rodríguez León, que aspiró al cargo en el año 2015, admitió a ABC que no tiene intención de intentarlo de nuevo, hay otros nombres que suenan. Tampoco es descartable que el fiscal delegado de Medio Ambiente, Javier Rufino, se presente. A sus 53 años, Rufino no sólo reúne experiencia suficiente, sino que por su amabilidad y su exquisito trato , es muy querido por sus compañeros. Algunos ya se lo han pedido en los últimos días. Sin embargo, como otros fiscales que aún no han mostrado sus cartas, se lo está pensando. Ya ello hay que añadir la posibilidad de que compitan otros fiscales de otras provincias. La batalla por la sucesión en la Fiscalía de Sevilla está abierta.