Cabalgata de Reyes Magos de Sevilla

Enrique Ybarra: «No hay nada más maravilloso en la vida que hacer felices a los demás»

A Melchor su padre le decía que «el 5 de enero la Cabalgata hacía que fuese el día grande de Sevilla»

Cabalgata de Reyes Magos en Sevilla 2020: en directo retransmisión y minuto a minuto

Enrique Ybarra Valdenebro Raúl Doblado

Pedro Ybarra Bores

El rey Melchor de este año conoce bien el camino de Oriente debido a la cantidad de kilómetros que recorre cada año por tierra, mar y aire para dirigir el negocio de autobuses de dos plantas que fundó por más de cien ciudades del mundo. Medalla de la Ciudad de Sevilla, Premio Andalucía de Turismo, de la Cámara de Comercio o el Premio Trayectoria Empresarial ABC avalan al presidente de City Sightseeing, quien afirma que «la constancia, la transparencia y el equipo humano son claves del éxito».

Ya lo decía Cristóbal Cervantes en el acto de Proclamación de los Reyes Magos celebrado a principios del mes de diciembre: «Melchor significa “rey de la Luz”». Al nuestro, a Enrique –su Rey– le traía de niño un fuerte de indios, el Cinexin, los Madelman, Magia Borrás, Exin Castillos o el Scalextric». Más adelante ponía aquello de «traedme lo que vosotros queráis», porque le gustaba mucho que lo sorprendieran la mañana del 6 de enero. Encarnar al rey Melchor de la Cabalgata de Sevilla de 2020 «es un honor. Por ello quiero dar las gracias al presidente del Ateneo y a todos los ateneístas por pensar que soy merecedor de este privilegio: poder recorrer esta tarde de enero la calles de Sevilla repartiendo ilusión para hacer felices a todos los ciudadanos, porque creo que no hay nada más maravilloso en la vida, no hay nada más grande, que hacer felices a los demás», dice.

Según Melchor, «siempre pienso que haciendo feliz a los demás, acompañado de Dios, es la manera de conseguir la felicidad plena en el ser humano». Recuerda también como «un momento muy especial, que además no podía creer», el día en el que el presidente del Ateneo le comunicó que le gustaría que fuese reyMelchor en la Cabalgata de Sevilla. «Sentí una emoción tremenda. Diría que un sueño, que en ese momento se me venía ala memoria esos momentos maravillosos de cómo había vivido la Cabalgata de Reyes Magos desde pequeño con mis padres y hermanos. La Cabalgata de Reyes Magos en mi casa ha sido algo importantísimo. Lo hemos vivido siempre con una pasión e ilusión tremenda», añade.

«Mi padre decía que el 5 de enero la Cabalgata de Reyes hacía que fuese el día grande de nuestra ciudad , que con la magia y la ilusión hacían posible que los pequeños y mayores fuesen felices aquí. Por eso para mí fue un momento mágico cuando me lo comunicaron. Desde entonces he vivido momentos maravillosos, incluso me he dado cuenta que no es solo ese día, sino que son los 365 días del año los que el Ateneo hace posible esa ilusión, esa magia y esa felicidad en los sevillanos», dice.

Para el empresario, reconvertido en rey, «desde el día en el que me nombraron mi familia, amigos, conocidos, compañeros de trabajo, gente que no conocía incluso, me felicitaban por la calle con la ilusión y la misma alegría que yo tenía en ese momento».

El rey Melchor concentra la magia de los Reyes Magos en dos momentos vividos en los últimos meses: «Dos días antes de ser publicado el nombramiento estaba visitando a un familiar que estaba pasando un momento malísimo en el hospital y estaba realmente débil. Durante el rato que estuve allí quería comentárselo porque no sabía cuánto tiempo más podría estar con ella. Cuando se fueron de la habitación me quedé y le dije: “Tía María, tengo que decirte que en dos días comunicarán que este año voy a representar al rey Melchor en la Cabalgata” . A pesar de la debilidad, se levantó, saltó en la cama con los brazos abiertos y las palabras fueron: “Qué ilusión, enhorabuena. Esto es lo más grande”. No sabía qué decir en ese momento, y durante el tiempo que estuvo hasta que se fue preguntaba continuamente por ello. Esta es la ilusión que da esta Cabalgata», recuerda emocionado.

Por otro lado, un día comentando sobre personas que pudiesen tener la ilusión y no los medios para salir en la Cabalgata con el Ateneo, le hablaron de una pequeña que estaba enferma y preguntó si había posibilidad de ayudarle para cumplir el sueño de esta muchacha. «La llamé y le empecé a contar que era el rey Melchor y que le llamaba para conocerla y para invitarle a acompañarme durante la próxima Cabalgata. Poco a poco se fue iluminando el tono de voz de esa pequeña . Al final, tras la pregunta, fue una explosión total de ilusión y felicidad. Eso es lo que hace posible el Ateneo, el presidente y su equipo durante el trabajo que realizan durante los 365 días del año: trabajar para hacer felices a los ciudadanos de Sevilla. Millones de gracias a todos ellos».

«El 5 de enero, con la ilusión de sus majestades, con la ilusión del maravilloso cortejo, con la magia del Ateneo y con la fuerza que Dios nos dará haremos una vez más que sea el día grande de Sevilla y que todos los sevillanos estén llenos de felicidad», concluye.

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