500 aniversario
Primera vuelta al mundo: Elcano, capitán de la Nao Victoria
Primera vuelta al mundo es una serie de artículos en la que el marino Ignacio Fernández Vial recrea cada sábado el viaje de Magallanes y Elcano
El día 13 de julio de 1521, el capitán de la armada, Juan López Caraballo , rinde a un junco al salir de Brunéi en el que iba el hermano del rey de Mindanao , al que hace subir a su nao. El resto de los tripulantes que veían la escena pensaron que este personaje sería utilizado como moneda de cambio, y que el capitán le comunicaría que quedaba preso hasta que los tres tripulantes de la Trinidad, que el cacique de bruneano había retenido en tierra, fueran liberados. Pero de manera inexplicable Caraballo decide dejarle en libertad y decimos de manera inexplicable porque con este gesto condenaba a sus compatriotas, entre los que se encontraba su hijo Joacinho, a ser abandonados a su suerte en una tierra hostil. La reacción airada de sus hombres no se hace esperar y cuando se encontraban calafateando los barcos en Tigabu Jeti , deciden quitar a Caraballo el mando de la armada. Tuvo que ser en tierra firme, ya que mientras estuvieran en la mar el capitán era inviolable.
«Después se hizo proceso contra Caraballo e le privaron de la capitanía, por los desaguisados y de servicios contra Su Majestad hacía».
Hay que hacer destacar que una vez desaparecido Magallanes , los capitanes fueron elegidos por consenso entre todos los mandos de la armada. Pero también hemos podido ver en este caso concreto que si el hombre en el que habían depositado su confianza no les correspondía adecuadamente, lo sometían a proceso y de considerarlo culpable, lo destituían. Este sistema democrático que utilizaban para nombrar a sus capitanes no mermaba ni un ápice la autoridad de los mismos, pues mientras estuvieran en posesión de su cargo, su autoridad era total, de acuerdo con la ancestral tradición de la mar, y si algún hombre se atrevía a desobedecerle era castigado con dureza.
«La gente eligió por capitanes a Joan Sebastián Elcano y a Joan de Espinosa , e por tesorero e contador de todas las mercaderías al dicho Joan Sebastián , e por contador a un Martín Méndez , vecino de Sevilla y escribano de la nao Victoria».
¿Qué día ocupó el cargo de capitán el hombre que a partir de este momento protagonizaría el feliz final de la aventura de la nao Victoria? Nos dicen los cronistas que le dieron el mando poco antes de partir del puerto de Tigabu Jeti . Nosotros creemos que sucedió el 16 de septiembre de 1521, ya que este día fue cuando Elcano deja de cobrar la paga de maestre para pasar a recibir el salario de capitán, según el documento en el que se relacionan los sueldos debidos a los tripulantes de la armada al término de la expedición.
Otra cuestión a aclarar es la de saber qué lugar ocupó Elcano entre los tripulantes una vez sofocado el célebre motín de San Julián y si había seguido siendo maestre o por el contrario, dada su evidente participación en la asonada, había sido degradado a la simple condición de marinero. El comentario de Mafra que transcribimos a continuación, responde a esta cuestión.
«Hicieron capitán de la otra nao a Juan Sebastián del Elcano, que desde el estrecho hasta que murió Magallanes, había sufrido muchos disfavores, más él como discreto sufrió, hasta que tornó a su cargo que había perdido con estos dos navíos». Y entre los documentos del Archivo General de Indias se dice que «el capitán Juan Sebastián Delcano, que fue por maestre de la Concepción y fue mudado della con mandato del capitán, vino en la nao Victoria por capitán».
Luego queda claro que estos desfavores que sufre Elcano por parte de Magallanes no eran sino la degradación al escalón más bajo de los profesionales de la mar, el de marinero. Sabemos que en San Julián fue trasladado de la Concepción a otro barco y que éste no pudo ser otro que la Victoria, por la sencilla razón de que la Santiago ya no existía, que conocemos la nómina de los tripulantes de la San Antonio cuando esta nave regresa a Sevilla, y que en la Trinidad iba embarcado Magallanes , luego lo lógico es pensar que no lo llevara consigo, ya que no hubiera sido prudente enrolar en su mismo barco a su potencial enemigo. Por tanto y por descarte, únicamente nos queda la nao Victoria, en la que permanecería hasta culminar la primera vuelta al mundo.
En un documento custodiado en el Archivo de Simancas , leemos que Elcano en agosto de 1519 tenía la edad de «treinta y ocho años más o menos», luego cuando cogió el mando de la Victoria tendría unos 40 años recién cumplidos.
Tres días antes de salir de Tigabu Jeti, muere de «súbito» Pedro de Muguerteguy , grumete de la Victoria. El 18 de septiembre, ya con los barcos en buenas condiciones, dan por finalizada su larga estancia en esta pequeña isla y se hacen a la mar para reanudar su travesía. Aún a vista de costa, se encuentran con un junco al que persiguen hasta apoderarse de él y en el que iba a bordo el gobernador de la isla de Palawán con su hijo. A cambio de su libertad, le obligan entregarles cuatrocientas medidas de arroz, veinte cerdos, otras tantas cabras y ciento cincuenta gallinas. No solamente les dio todo lo que pidieron, sino que voluntariamente les llevó más víveres y en agradecimiento a su generosidad le entregan unos presentes, «por lo que nos separamos de buena armonía».
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