La Fundación Cruzcampo premia el uso de la cultura como palanca de acción social

La Fundación Cruzcampo ha entregado esta mañana sus primeros Premios Cultura Viva, una iniciativa que, como ha señalado su directora, María Ángeles Rodríguez Trujillo, y refrendado su pesidente, Jorge Paradela, quiere convertirs en «un espacio de encuentro para las entidades sociales e instituciones que usan la cultura como palanca social».

A los premios se han presentado un total de 187 proyectos, la mayoría de Andalucía aunque también han optado a él iniciativas promovidas en otros puntos de España o del extranjero que tenían como punto de referencia la comunidad andaluza. De esos proyectos se han seleccionado diez en los que, explicó la presidenta de la Fundación Cruzcampo, se han valorado la innovación, la calidad, la capacidad de transfomar el entorno y el hecho de ser sostenibles y busquen perdurar en el tiempo.

De los diez proyectos premiados, cinco son sevillanos, tres malagueños,uno almeriense y otro granadino, varios están relacionados con el teatro, la música y expresiones artísticas que sirven para animar el interés por la cultura y la integración.

Entre los proyectos sevillanos reconocidos por la Fundación Cruzcampo se encuentra el programa «es+Fácil:accesibilidad cognitiva en los espacios culturales del Año Murillo», desarrollado por la Asociación Autismo Sevilla que busca acercar a la cultura a las personas con dificultades de comprensión con claves, pictogramas o imágenes pero contando con ellos, y que ha tenido su primera aplicación en la exposición «Velazquez. Murillo.Sevilla» que se celebra en la sede de la Fundación Focus.

La Fundación Cruzcampo también ha reconocido el Encuentro Internacional de Jóvenes Creadores en las Artes Escénicas que desarrolla la Asociación Cultural Teatro Habitado en Mairena del Alcor, que desde 2012 reúne en verano y durante 4 días a profesionales del teatro con aficionados. Este proyecto ha conseguido llevar a Mairena a 50 compañías procedentes de varios, países, desde Irán a Noruega, de Holanda a Chile o México, cuyos miembros han participado con jóvenes aficionados en talleres, grupos de trabajo o puestas en escena de obras de teatro contemporáneo.

El arte como terapia ha sido la apuesta de la Asociación de Personas con Discapacidad Intelectual «Niños con amor». Su taller de Arteterapia, donde eñ trabajo con el cuerpo, el movimiento y la música se usan como hgerramienta para trabajar la autoestima o las relaciones sociales de las personas con discapacidad intelectual, también ha sido reconocido con un premio Cultura Viva.

Otro de los proyectos reconocidos por la Fundación Cruzcampo ha sido el que desarrolla la Fundación Alalá en la barriada de las Tres Mil Viviendas. Lo que empezó como una pequeña peña flamenca se ha convertido en una escuela de refuerzo escolar que utiliza el cante, el baile, la guitarra, en fin el flamenco, como un incentivo más, y en la que participan 95 niños.

También la apuesta por la música hizo que la Asociación Omnia Musicae, radicada en Bollullos de la Mitación, pusiera en marcha el Festival Internacional de Música de Cámara Joaquín Turina, reconocido también por la Fundación Cruzcampo, y que este año celebrará, coincidiendo con el 135 aniversario del nacimiento del compositor sevillano, su sexta edición. Se trata de un encuentro en el que intérpretes consagrados comparten su saber con jóvenes músicos y el público en programas de 14 conciertos y 200 horas de ensayo abiertas a todos el mundo y con el que persiguen recuperar la música de cámara y promover la herencia cultural española a través de la música de Turina. El festival, que ha conseguido llevarse a cabo en escenarios tan singulares como la Casa Salinas o La Carbonería, es posible gracias a la financiación público-privada.

Junto a estas iniciativas la Fundación Cruzcampo también ha premiado el proyecto «Superuno.Islas de Creación Contemporánea» desarrolla por Mediterráneo Centro Artístico, de Almeria para promover la interactuacón continua entre los artistas y la sociedad;el taller de Teatroterapia de la Asociación Síndrome de Asperger y Tea de Málaga para mejorar las habilidades comunicativas de las personas que padecen este trastorno; la campaña «Los Buenos Tratos» de la Asociación Al Sur, una iniciativa contra la violencia de género y por la educación en igualdad; el proyecto Arquitectura para Niños, de la malagueña Arqkids Education o el Festival de Artes Escénicas de la Alpujarra «Me vuelves Lorca».