Una nueva enfermedad Menos ruido, por favor

Una nueva enfermedad. Se ha descrito una nueva enfermedad. Afecta a los sanitarios, sobre todo a médicos y enfermeros. Este grupo social que como sabemos son los que nos ayudan, a pesar de sus imperfecciones, a mitigar nuestro dolor y nuestra angustia. Nos curan, nos asisten desde que nacemos hasta que morimos. Tratan de prevenir nuestras enfermedades, intentan prolongar nuestras vidas y lo hacen con una dedicación en ocasiones sin límites. Pero ahora han enfermado. Sus síntomas son el desconcierto, la rabia, la sorpresa, la minusvaloración y el miedo. Miedo a perder su trabajo, miedo a no poder realizar una medicina digna, miedo al derrumbe. Ahora ya saben que esos síntomas son parte de una enfermedad que ha comenzado en Madrid y se llama privatización. Pero los sanitarios ya saben que esta plaga está causada por unos especuladores y sus representantes políticos, que se han propuesto acabar con el estado de bienestar. También saben que solos no podrán vencer a esta enfermedad y por ello, como tratamiento, llaman a los ciudadanos a la insumisión ante la injusticia para poder recuperar la dignidad y la salud.

Como vecina del centro de Cádiz me gustaría hacer una llamada al civismo a los padres que permiten a sus hijos jugar con petardos hasta altas horas de la madrugada en estas fechas. Además del peligro que representan para su salud, suponen una molestia constante para el descanso.