Navantia echa las redes en una docena de países para captar nuevos encargos

La falta de encargos en Navantia intensifica las labores de búsqueda. La dirección no deja pasar ni una sola oportunidad para cazar nuevos contratos. La situación comienza a ser crítica en todos los astilleros y la semana pasada ya se convocaron las primeras manifestaciones en El Ferrol. La Bahía hace tiempo que nota ese descenso de la carga de trabajo. Una vez que se completen los tres últimos patrulleros oceánicos (POV) de Venezuela y los cuatro buques de acción marítima (BAM) para la Armada Española no quedará nada más en el dique hasta el inicio de la producción de los cinco nuevos barcos que anunció Defensa a finales del año pasado.

La flota nacional no hará mayores ampliaciones de momento a juzgar por la situación económica. Las miras están puestas en los encargos que se puedan captar de fuera y Navantia ya ha presentado ofertas en al menos una docena de países. Los últimos han sido Brasil, donde el mes pasado pujó por un lote de cinco patrulleros, otras cinco fragatas y un buque de aprovisionamiento en combate (BAC) y Turquía, que abrió la convocatoria el pasado martes para un buque anfibio. Precisamente el Juan Carlos I, que es de este tipo, viajará en unas semanas a Estambul y se aprovechará esta visita para vender la oferta española.

Ambos contratos tardarán algún tiempo en decidirse. Más inminente parece el acuerdo con Venezuela para el mantenimiento de los barcos que ya ha recibido su Armada. Esta línea se denomina Apoyo al Ciclo de Vida y, según avanzaron fuentes de Navantia, es posible que se pueda cerrar antes de finales de este año. Este trabajo supone una nueva línea de diversificación de los servicios que da una mayor independencia a las plantas de construcción, ahora sujetas a los nuevos encargos.

Los técnicos de los astilleros públicos ultiman en estos días la presentación que llevarán el próximo mes a Canadá durante una feria del sector. Van a pujar por un BAC como el Cantabria, que construyen los astilleros de Puerto Real. Aunque aún no hay nada firmado, la Armada canadiense ya ha pedido a los astilleros españoles que incluyan algunas modificaciones en un acuerdo aparte que cuenta con financiación.

Contrato inminente

Antes del verano es posible que se firme también el convenio con Australia para construir doce lanchas en la Bahía. Las factorías gaditanas llevan tiempo esperándolas, pero se han visto retrasadas por el cambio de gobierno en el país tras las últimas elecciones.

Con Sudáfrica hay también algún contacto para un programa para patrulleros que interesaría a Cádiz y otro para un buque anfibio que hace El Ferrol. Estas negociaciones estaban congeladas desde hace algún tiempo, pero parece que este año se podría producir un avance. No ocurre lo mismo con Malasia, que se interesó también por los patrulleros oceanográficos.

Parados sigue los acuerdos con Noruega, India y Catar. La situación económica influye en los planes de inversión de estos países que mantienen una buena relación con la compañía española. El Gobierno noruego es un cliente habitual de los astilleros gallegos. Ya ha recibido todas las fragatas que encargó y ha mostrado interés por un BAC, aunque aún no ha movido ficha.

Tampoco lo ha hecho India, donde Navantia tiene interés en entrar. Quiere buques anfibios, fragatas y submarinos, pero no ha convocado concurso ni ha dado fechas. Catar se ha interesado por los patrulleros y parece que la última visita del emir puede contribuir a que se llegue a algún tipo de acuerdo, pero «estas cosas llevan su tiempo», apuntaron las fuentes consultadas. En total, Navantia tiene contactos para 44 acciones comerciales que están abiertas.