Rajoy apoya «con firmeza» las reformas democráticas iniciadas por el rey de Marruecos

Mariano Rajoy ha disipado cualquier duda sobre un posible cambio de rumbo en las relaciones entre Madrid y Rabat. "Me considero un amigo de Marruecos", ha indicado el presidente del Gobierno español tras ser recibido por su homólogo marroquí, Abdelilah Benkirane y por el rey Mohamed VI.

Rajoy ha tranquilizado, sobre todo, al propio presidente Benkirane que dos días después de ganar las elecciones en su país comentó que España y Marruecos estaban "condenadas a entenderse", pero que creía que con Mariano Rajoy en la Moncloa "serían más difícil". Esta aparente frialdad ha desaparecido nada más pisar tierra el avión que ha trasladado a Rajoy desde Madrid a Rabat, ciudad en la que ha permanecido seis intensas horas.

Ambos mandatarios han calificado el encuentro de "satisfactorio" y han anunciado que en otoño retomarán las reuniones al máximo nivel para que ambos países dejaron de celebrar en diciembre de 2008. Un cónclave que fuentes diplomáticas tildan de clave para los intereses bilaterales de ambos países.

Mariano Rajoy, además, ha asegurado que "apoya con firmeza" con firmeza el proceso de reformas democráticas, sociales y económicas emprendido por el rey marroquí. Gracias a ellas, Benkirane logró las presidencia al ser el candidato más votado en las elecciones legislativas del 25 de noviembre del año pasado -sólo cinco días después del triunfo del PP en España-.

Antes de la primavera árabe, Marruecos no tenía presidente, sino primer ministro y lo designaba el monarca alauí. "No hay en el mundo un país más interesado que España en contar con un Marruecos, democrático, próspero y estable", ha espetado el jefe del Ejecutivo español. Una fórmula que recuerda a la que empleaba la anterior administración socialista española, en concreto el ex ministro de Asuntos Exteriores socialista, Miguel Ángel Moratinos.

"Somos dos reinos -ha añadido Rajoy- con muchos siglos de historia a las espaldas y las relaciones que mantienen nuestros dos reyes son el más importante activo de nuestra relación". Al hilo de esta reflexión, el jefe del Ejecutivo español ha insistido en que Marruecos es el tercer mercado de España fuera de la Unión Europea y el segundo socio comercial e inversor. "La seguridad, la estabilidad y la prosperidad de Marruecos lo son de España", ha espetado desde el convencimiento de que "es mucho más" lo que une a ambos reinos que de los que "lo que nos pueda separar".

Benkirane, por su parte, ha confesado que durante las horas que ha compartido con su colega español ha descubierto "a una persona amable, simpática y muy capacitada para desempeñar la función que ostenta desde hace menos de un mes". Ha augurado, asimismo, que tras la cita de Rabat vendrán otros muchos más encuentros donde abordarán todos los temas desde "la franqueza, la sinceridad y la espontaneidad".