El 'Playa de Bakio', atunero vasco secuestrado en abril que dio a conocer el problema en España, fondeado en las Seychelles en otra ocasión. /ARCHIVO
fondearán en las seychelles

Los atuneros españoles y franceses del Índico se plantan pidiendo soluciones contra la piratería somalí

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Las islas Seychelles nos suenan a vacaciones, pero son testigo hoy de una protesta nada lúdica: los 24 atuneros españoles -en su mayoría vascos- que faenan en aguas del Índico, ocho barcos de soporte para estas naves y otros 18 atuneros franceses se dirigen al puerto Victoria del archipiélago para permanecer allí fondeados como medida de protesta contra los últimos intentos de secuestro llevados a cabo por piratas somalíes. Se espera que entre mañana y el martes queden atracadas todas las naves.

Según detalla un atunero de Bermeo (Vizcaya) que faena en la zona, nada más conocerse ayer el ataque pirata con granadas contra un atunero francés que pudo huir llevándose de recuerdo sólo daños materiales, el resto de naves de ese país decidió volverse a puerto para denunciar la inseguridad en la que desarrollan su trabajo.

El problema se empezó a conocer en España en abril, cuando el navío vasco 'Playa de Bakio' fue efectivamente secuestrado. Y el ataque de ayer se suma otro intento de secuestro, el del atunero de Bermeo 'Playa de Anzoras' llevado a cabo esta misma semana. Así que los españoles se han sumado a una protesta decidida de forma "unánime" con los franceses para volver a puerto como medida de presión, a la espera de que las autoridades españolas y galas se decidan a enviar algún tipo de dispositivo de vigilancia y protección de los atuneros y sus tripulaciones.

Ante este panorama, el estado de ánimo de los tripulantes españoles es de "frustración e indignación", aunque se hallan "más tranquilos" porque saben que van a entrar en puerto. "Antes veíamos como un cúmulo de circunstancias malas para que te tocase la mala suerte de que te atacasen, pero ahora ya no se ve tan lejano. No ya preocupación por el buque, sino por las personas. Aquí, hasta que no ocurra una desgracia, no se va a tomar ninguna determinación", se lamentan.

Cosa de los armadores

A pesar de amarrarse a puerto, los tripulantes del atunero señalan que deben ser los armadores, a través de la Asociación Nacional de Armadores de Buques Atuneros Congeladores (ANABAC), los que se pongan en contacto con las autoridades pertinentes para exigir protección para los barcos. "Nosotros desde aquí poco podemos hacer", han señalado.

Por otra parte, sospechan que los piratas cuentan con varios barcos nodriza que portan lanchas rápidas. "Se aproximan a los barcos y cuando están a una distancia corta, arrían las lanchas y abordan la nave", han explicado los afectados, para advertir de que "si son actos de piratería, no están protegidos por ningún organismo nacional. Aunque estén en aguas de Somalia, está reconocido en el derecho internacional que se pueda actuar contra ellos", han agregado.

En este sentido, los tripulantes de los atuneros precisan que "no hay un gobierno somalí propiamente dicho que pueda reclamar en caso de que un barco de guerra entre en sus aguas, porque están en plena guerra civil, y no hay quien dé ningún tipo de orden".

La nueva 'célula antipiratas', para mañana

Esta situación se produce poco después del adelanto hecho por el presidente José Luis Rodríguez Zapatero, que informó de que los ministros de Asuntos Exteriores de la Unión Europea probarán mañana lunes la creación de "una célula de coordinación" para contribuir a la lucha contra la piratería en Somalia, a la espera de que la UE impulse "una eventual operación militar naval" en la zona.

La célula estará dirigida además por un gallego, el capitán de Corbeta Andrés Breijo Claur, según adelantaron fuentes diplomáticas españolas. En principio estará compuesta por cuatro personas (el jefe de la célula, dos oficiales y un suboficial), tendrá un presupuesto mensual de alrededor de 15.000 euros y sede en las dependencias del Estado Mayor de la UE en Bruselas.