El secretario general del PP-A, Antonio Sanz, y el alcalde de Córdoba, José Antonio Nieto, ayer durante la interparlamentaria del PP. :: EFE
ANDALUCÍA

Cospedal maneja con puño de hierro los plazos del candidato andaluz

La secretaria general del PP reparte elogios entre José Luis Sanz y José Antonio Nieto, principales candidatos para enfrentarse a Susana Díaz, pero no los únicos

CÓRDOBA. Actualizado: Guardar
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Un candidato que, sin generar un nuevo problema interno a Mariano Rajoy, pueda disputar con garantías la presidencia de la Junta de Andalucía a la socialista Susana Díaz. Estas son las dos prioridades que se ha marcado María Dolores de Cospedal para intentar llevar a buen puerto la difícil transición del PP andaluz de Javier Arenas al nuevo proyecto que anhela Génova. La secretaria general maneja con puño de hierro los tiempos de este relevo y no admite ninguna injerencia, para desesperación y enojo de buena parte de los mandatarios provinciales del PP andaluz.

Las quejas, de momento en privado, se centran en lo que consideran un grave error de diagnóstico: la figura de la socialista Díaz crece por semanas sin apenas oposición, ante la falta de un referente popular que le dé la réplica adecuada tanto en el Parlamento de Andalucía como en el debate político diario. Córdoba, ciudad donde el PP celebra su 20.ª Interparlamentaria, parecía el escenario adecuado para que el partido diera a conocer el nombre del candidato. «Hasta donde yo sé, aquí no se va a hablar de eso», comentó nada más llegar Javier Arenas, vicesecretario de política autonómica del PP.

Y tenía razón. Cospedal mantuvo varias conversaciones en privado con Juan Ignacio Zoido, alcalde de Sevilla y presidente del PP andaluz, pero no hubo fumata blanca. Será Cospedal quien presente a Mariano Rajoy una terna de nombres para que el líder del PP elija.

Nombres se han barajado varios. Los más suenan en los mentideros políticos madrileños son los de José Antonio Nieto, alcalde de Córdoba, y José Luis Sanz, secretario general del PP de Andalucía. Ambos participaron en la jornada inaugural de esta parlamentaria. Cospedal, consciente de que sus palabras se iban a medir al milímetro, repartió elogios entre los dos. Alabó la capacidad de gestión de Nieto al frente del Consistorio cordobés, pero recalcó que Sanz -actual escudero de Zoido- «lleva sobre sus hombros el peso del partido, y eso nunca es fácil».

Poco más. Cospedal, fiel defensora de la disciplina interna, no dará un paso sin el permiso de Rajoy. El presidente del PP, de momento, no ha tomado cartas en el asunto. Fuentes del partido no descartan, incluso, la aparición de alguna sorpresa, aunque en ningún caso será un ministro -sonaron los andaluces Fátima Báñez y Miguel Arias Cañete-.

Incluso, los populares barruntan la posibilidad de instaurar de manera transitoria una bicefalia: Zoido mantendría la presidencia del partido, sobre todo si el designado no es parlamentario andaluz, y un hombre o una mujer «joven» sería el cabeza de cartel.

Diputados andaluces y cargos orgánicos regionales y provinciales lamentan que Cospedal no otorgue una mayor autonomía al PP andaluz para seleccionar al sustituto de Arenas. «Digo yo que algo tendremos que decir, porque nosotros estamos sobre el terreno todos los días y conocemos Andalucía mejorar que nadie», espetó un miembro de la junta directiva regional del PP. Desde Génova, la polémica se ve en clave de la lucha por la Moncloa. Si el PP se agrieta en Andalucía a causa de disputas internas, el triunfo de Rajoy en 2015 se complicaría gravemente.

«Máxima prioridad»

La implicación de Cospedal en la carrera sucesoria en el PP andaluz es tal que la secretaria general hizo noche en Córdoba, cuando lo usual es que la número dos del PP inaugure este tipo de foros por la mañana de la primera jornada y regrese a CastillaLa Mancha, dejando todo el protagonismo a Mariano Rajoy en la clausura.

La número dos del PP, que calificó de «memez» la interpretación de que su formación ha roto relaciones con José María Aznar, puso el acento en que la renovación del PP andaluz es un asunto de «máxima prioridad» para la dirección nacional del partido. «Un diez sobre diez», remachó en alusión a la importancia que concede el PP al candidato en Andalucía.

Eso sí, en conversación informal con periodistas en Córdoba remachó que «prioridad» no es sinónimo de prisa y recordó que Susana Díaz apenas lleva dos meses al frente de la Junta de Andalucía.