José Antonio Castro, Diego Valderas y Ignacio García, ayer tras anunciar el voto en contra del dictamen. :: RAÚL CARO. EFE
caso de los ere

Los ERE separan al PSOE de IU

La comisión de investigación acabará sin dictamen al anunciar IU que votará en contra en el Pleno del Parlamento

SEVILLA. Actualizado: Guardar
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Por primera vez desde que echó a andar el gobierno de coalición el pasado mes de mayo, PSOE e IU se separan en una votación clave en el Parlamento. Los ERE tienen la culpa. Izquierda Unida anunció ayer que no respaldará en el Pleno del Parlamento del miércoles el dictamen que aprobó la comisión de investigación el pasado jueves porque el documento refleja solo una parte de sus conclusiones. Dado que el PP votará en contra, el PSOE se queda solo para sacar adelante el texto final de la comisión sobre los ERE fraudulentos, pero sin mayoría suficiente para que se apruebe. Cabe augurar, pues, que la investigación parlamentaria sobre el mayor fraude conocido hasta ahora en la administración de la Junta saldrá sin conclusiones.

PSOE y PP coincidieron el jueves en la comisión en votar en contra de la petición de responsabilidades políticas a los exconsejeros José Antonio Viera y Antonio Fernández, como sí reclamaba Izquierda Unida. La votación del PP contra todo el documento, porque no incluía a Chaves y Griñán, permitió que saliera adelante la tesis del PSOE, de reclamar responsabilidad solo al exdirector general de Trabajo Javier Guerrero y una reprimenda al exinterventor Manuel Gómez.

También desaparecen las aseveraciones que IU incluyó sobre la falta de control y la forma de hacer política en departamentos estanco de los gobiernos socialistas.

El coordinador de IU CA, Diego Valderas, explicó ayer que sus 12 diputados no respaldarán un dictamen «bastardeado y mutilado». Valderas escenificó su negativa acompañado de Ignacio García, presidente de la comisión, José Antonio Castro y Alba Doblas, diputados miembros de la misma.

El vicepresidente y dirigente de IU CA no estaba convencido de este paso el pasado viernes. Incluso llegó a calificar el resultado de la comisión del jueves de «magnífico». Dirigentes de Izquierda Unida han presionado para que la formación sea congruente con la postura beligerante que ha mantenido contra el caso de corrupción en la Junta. Apoyar que el único responsable político del presunto fraude es el exdirector general de Trabajo Javier Guerrero es quedarse muy abajo del listón de responsabilidades que habían fijado.

Sobre el interventor

Ignacio García, presidente de la comisión y autor del informe de síntesis que se aprobó demediado el jueves, criticó ayer que se haya quedado fuera la selección sin control de las aseguradoras, el cobro de comisiones, la concentración de ayudas en la sierra Norte de Sevilla y la falta de comunicación entre las consejerías.

En relación al exinterventor general de la Junta Manuel Gómez, García considera, según recoge Europa Press, que «no es ético» que se haya «mutilado» del informe la parte en la que se decía que realizó hasta 15 advertencias, y que sí se haya dejado la parte en la que se dice que «podía haber hecho más», dando a entender su responsabilidad.

IU descarta que las diferencias con el PSOE por el caso de los ERE enturbie la buena marcha de la coalición de gobierno. El portavoz de IU, José Antonio Castro, se apresuró a recordar que la comisión de investigación no estaba incluida en el pacto de abril y que tampoco se ha pactado nada con el PSOE sobre ello durante la investigación.

En el mismo sentido se pronunció el vicesecretario general del PSOE andaluz, Mario Jiménez, quien manifestó que no va a «exigir» ninguna posición a Izquierda Unida sobre el voto del miércoles como tampoco IU se la va a exigir a los socialistas. Pese a este pacto de no agresión sobre el asunto, Jiménez sí dejó caer un cierto reproche: «Si IU decide no defender lo que ha venido defendiendo hasta ahora, es su responsabilidad».

Tato Valderas como Jiménez arremetieron contra el PP por votar contra sus propias conclusiones, en referencia a la petición de responsabilidades de los exconsejeros.