La huelga de autobuses deja sin servicio a miles de personas

Pese a los esfuerzos del Gobierno local por restarle importancia a la huelga de transportes urbanos, hasta el punto de negar el problema porque «las distancias son cortas» en la capital -según la alcaldesa Teófila Martínez-; la realidad está siendo otra: colas en las paradas y muchos visitantes que se enteraron del conflicto cuando acababan de aterrizar en la ciudad dispuestos a trasladarse al centro en autobús. Los servicios mínimos son claramente insuficientes para una población que se triplicó en la noche-madrugada del sábado y que el domingo también recibió una enorme afluencia. Los problemas de movilidad continuarán hoy y si no hay acuerdo en los próximos días, se volverán a repetir el próximo fin de semana, que hay convocada más jornadas de huelga.

Si las aglomeraciones son habituales cuando la noche del sábado de Carnaval toca a su fin en las paradas, la madrugada última fue especialmente complicada en ese sentido. Sólo dos autobuses en cada línea 1, 3 y 5 operaron desde las seis de la mañana a las ocho, cuando miles de personas suelen retirarse. Entre las ocho y las nueve circularon solo dos de la línea 2 y el servicio no se restableció hasta cerca de la una de la tarde pero solo un autobús de la línea 3. Por la tarde la situación empeoró. A partir de las 17.30 horas no salió ningún transporte hasta las 23.05; por lo que muchas personas que habían acudido a ver la Cabalgata regresaron como pudieron. Los taxis ayer se cotizaban muy alto y las esperas se hacían muy largas.

Sin embargo estos inconvenientes no existieron para el Ayuntamiento. En el balance difundido ayer ni se menciona esta cuestión. Este periódico acudió a fuentes oficiales del Consistorio para saber si tenían conocimiento de los perjuicios que están sufriendo los usuarios de este transporte. Aseguraron que desde la Policía Local no se les había trasladado ningún problema o incidencia acerca de la repercusión que está teniendo el conflicto laboral en la movilidad de los vecinos.

El secretario del comité de empresa de Tranvía, Manuel Prado, confirmó a este medio que se están cumpliendo los servicios mínimos estipulados -un 25% del horario habitual para los fines de semana-. «Sabemos que esta protesta está provocando muchos inconvenientes al ciudadano y queremos pedirle perdón, pero no nos han dejado otra opción ni el Ayuntamiento ni la empresa, que no tienen interés alguno en resolver este conflicto». Una disputa que nace a partir de la negociación del convenio colectivo.

A través de la prensa los trabajadores se han enterado de una posible reunión con la empresa mañana «pero no ha llegado ninguna comunicación oficial».