Las niñas vestidas de comunión precedieron a la imagen. :: MIGUEL GÓMEZ
CÁDIZ

La Pastora de Trille abre en el Rebaño de María el tiempo glorioso de procesiones

Los pequeños y los numerosos estrenos de la hermandad protagonizaron este inicio de los desfiles marianos de abalanza

CÁDIZ. Actualizado: Guardar
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«¿Papá por qué esta procesión no lleva penitentes?». Esta pregunta era una de las más repetidas ayer a las seis y media de la tarde en la puerta de la coqueta capilla del Rebaño de María. A la Madre del Buen Pastor no le faltan sus hijos pequeños, algunos van con ella en el desfile configurando una estampa singular, repetida e insustiuible y otros, en compañía de sus familiares, contemplan el paso de la conocida popular y cariñosamente como La Pastora de Trille. Curiosamente, en extramuros las procesiones de Gloria salen antes que en cualquier otro lugar de Cádiz y los fervores gozosos se concentran en el reducido espacio temporal y físico que transcurre entre el segundo viernes de mayo y el día 24, entre el Rebaño de María y María Auxiliadora. En esta ocasión, el calendario quiso que el desfile de la hermandad del Buen Pastor coincidiese con la festividad de la Virgen de Fátima, una de las más representativas para la iglesia católica, además era una jornada especialmente significada para el cristianismo ya que se cumplían 30 años del atentado sufrido por el papa Juan Pablo II por el ciudadano turco Ali Agcá.

Con puntualidad, y un sol de justicia que este año se echó de menos en Semana Santa, se abrieron las puertas del Rebaño de María y los niños comenzaron a adueñarse de la calle. En el desfile llamaba la atención uno de los estrenos más importantes previstos para este año, la segunda fase del simpecado, el bordado de la orla en el taller Santa Lucía de Cádiz. Asimismo también destacó el juego de sotanas y roquete para los servidores del simpecado y el juego de campanitas para el paso. La banda municipal de Barbate volvió a demostrar su buen hacer tras el paso, en un año inolvidable para la localidad jandeña tras la concesión del patronazgo a la Virgen del Carmen.

El cortejo siguió el itinerario tradicional y discurrió por Trille, García Carrera, Soleá, Alegría, Siguirilla, Trille, Madre del Buen Pastor, San Gabriel, García Carrera, Plaza de los Porches, Salvador del Mundo, Fantasía Bética, Atlántida, Amor Brujo, García Carrera y Trille. Llegó al Rebaño de María a la hora prevista. La próxima cita gloriosa, muy cerquita de allí, en el colegio de los Salesianos.