UGT niega que el ERE de Delphi incluyera a intrusos

Vivió toda la negociación de primera mano, convirtiéndose en uno de los portavoces autorizados en uno de los episodios más polémicos y cuyas heridas aún siguen supurando: el cierre de la factoría de Delphi, en Puerto Real. Por eso, cuando el nombre de esta compañía ha aparecido en el listado de empresas que investiga la Policía Nacional por haber tramitado un ERE con posibles irregularidades, el testimonio de Alfonso Valiente vuelve a adquirir una relevancia de primer orden. Ante las primeras preguntas, niega cualquier tipo de chanchullo para incluir a personas ajenas a la plantilla en las prejubilaciones.

Este sindicalista formaba parte del comité de empresa por UGT, junto a su compañero de siglas, Antonio Montoro, y estuvo presente en todo el proceso de cierre de la fábrica, incluyendo la entrega del listado de prejubilados a la firma Uniter; una de las aseguradoras que está siendo investigada como posible implicada en una trama que puede convertirse en uno de los grandes escándalos políticos. «No tenemos conocimiento de que haya irregularidades. Revisamos los listados cuando se estaba preparando el proceso y ahora lo hemos vuelto a hacer. Se han hecho más de 700 prejubilaciones, 400 en la primera tanda y otras 300 en la segunda. No tenemos constancia de que nadie de fuera entrara. El proceso estaba blindado y hasta donde llegamos no ha entrado nadie».

Valiente defiende la legalidad de la negociación. Al tratarse de un cierre empresarial que tuvo mucha repercusión mediática y en el que los trabajadores plantearon una fuerte oposición, este sindicalista sostiene que las distintas administraciones implicadas estuvieron muy encima de los acuerdos alcanzados. «No solo la Junta, sino que Uniter hizo muchos controles en su momento. También los sindicatos, que nos preocupaba que se cumpliera lo firmado».

Sobre la forma de proceder de Uniter, este representante de UGT explica que le entregaron los nombres de los prejubilados para que gestionara las pólizas de seguros, pero todos eran de Delphi. «No hemos visto a nadie que no estuviera afectado. No conozco otros EREs; no sé como se han gestionado otros como el de Santana; no sé qué condiciones tenían ellos, sé las que teníamos nosotros y en nuestro caso afectaba a los fijos y al personal de la empresa auxiliar, no a los trabajadores eventuales».