Los Aznar y De la Vega, los siguientes
MADRID. Actualizado: GuardarLas réplicas del sismo no solo afectan a la Audiencia Nacional, la Fiscalía y altos cargos del Ejecutivo, parece que también se dejarán sentir en la clase política española, sin distinción de partidos o de ideologías.
De las notas diplomáticas que se irán conociendo en los próximos días una se refiere a los informes elaborados por el ex embajador de Estados Unidos en España Eduardo Aguirre sobre una «jugosísima» cena con el matrimonio Aznar-Botella. Otra trata sobre la posible salida del Gobierno de la vicepresidenta María Teresa Fernández de la Vega.
Aguirre, que estuvo al frente de la embajada desde 2005 hasta 2008, es un especialista en reflejar en las notas no solo las conversaciones, sino los rasgos psicológicos de los que trata. Sobre José Luis Rodríguez Zapatero, por ejemplo, ofrece consejos de cómo hay que preguntarle para sacar provecho de la conversación.
Diferentes formas pero mismos fines usa el actual responsable de la legación diplomática norteamericana. Alan D. Solomont, recaudador de fondos para los demócratas, llegó al cargo hace menos de un año, pero ya ha tenido tiempo para informar a Washington sobre «asuntos de intereses». Así, tuvo que gestionar la primera polémica cuando, bajo la presidencia española de la Unión Europea, tuvo que anular la cumbre UE-Estados Unidos por problemas de agenda del presidente Barack Obama.
«La decepción española es profunda (nota del 23 de febrero de 2010). Estamos enfrentándonos al asunto de la misma forma en público y en privado, dejando claro que la decisión sólo tiene que ver con la agenda del presidente y no por la importancia que Estados Unidos concede a España».
En otro informe, fechado en enero de 2010, el embajador augura una «gran amistad» con la ministra de Defensa, Carme Chacón, tras comprobar que «Casablanca es la película preferida de ambos».