Vaivenes de un derecho

Un antes y un después. Aquel decreto sirvió de impulso a lo que ya era una realidad, la expresión escrita de forma periódica. Su estudio se enmarca mucho más atrás de aquel logro y se extiende hasta nuestros días. La Galería GH40 de San Fernando es la encargada de explicar esta amplia temática. Para apreciar la innovación que supuso el decreto de 10 de noviembre, es preciso hacer un breve resumen de la situación legal anterior. Algo que se consigue a través de las leyes reguladoras de la censura de impresos recogidas en la Novísima Recopilación de 1805. La falta de coacción en los años de la Guerra de Independencia, la promulgación del decreto, su paso por Las Cortes, la religión como límite, la abolición de la Inquisición o el final de la libertad de imprenta, todo ello resumido en una exposición con grabados de cuadros de Goya, óleos de Eugenio Lucas Velázquez 'La oración' y 'Los condenados por la Inquisición'. También destacan las estampas 'aquellos polbos' y 'no hubo remedio' de la serie 'Caprichos' del propio Goya, semanarios de la época y distintos documentos.

De esta muestra también sobresalen otras piezas como el 'Manifiesto de los persas' o el óleo de Zacarías González Velázquez, 'Fernando VII recibiendo el Manifiesto de los Persas'.

Durante su visita, el espectador podrá revisar algunos de los ejemplares de los periódicos clave en el periodo constituyente, 'El duende' y 'El semanario patriótico'. También podrá toparse con las caras retratadas de algunos de los liberales que lucharon por la aprobación de la Ley de Imprenta, como Agustín Argüelles, Diego Muñoz Torrero o Juan Nicasio Gallego, o contemplar el dibujo de Juan Gálvez 'Sesión de las Cortes en el Teatro de la Isla de León'.