La última carrera de Paco

Siempre acabo las carreras». Si Francisco Castillo hubiera comenzado desde temprana edad a competir, seguramente hubiera sido una estrella del atletismo. Pero no, su trabajo como chófer le prohibía salir a correr y tuvo que esperar a cumplir los 60 primaveras para dar rienda suelta a algo más que una simple afición. Desde entonces, todos los días salía a correr, a pesar de sus más de 80 'tacos'. Pero Paco dio este lunes su última carrera. Este atleta jerezano, el más veterano de las competiciones andaluzas, falleció de madrugada dejando un gran vacío dentro del atletismo provincial.

Reserva de 1925, Castillo había continuado participando en todas las millas y maratones de la provincia hasta el pasado año. Contaba con marcas récords en más de seiscientas pruebas deportivas, después de toda una vida compitiendo y convirtiéndose en todo un ejemplo de deportividad. De hecho, en la última edición de la Carrera de la Fruta fue homenajeado por la Delegación de Deportes, en un acto emotivo en el que recibió el cariño de todos sus compañeros y amigos.

«Todos los días hago entrenamiento. Me levanto muy temprano por las mañanas y ya a eso de las siete me pongo a correr. Como no tengo gente joven que me acompañe, suelo correr solo. Me suelo hacer unos ocho kilómetros, un día sí y otro no, para no cargar demasiado las piernas». Hace cinco años, cuando sumaba 80 años, Francisco atendía a LA VOZ en su domicilio. Allí, entre trofeos y la mirada de Dolores, su esposa y primera seguidora, Paco se vanagloriaba de que siempre acababa las carreras: «Todas las veces llego a la meta y además siempre tengo trofeos ya que en estas competiciones no participan atletas mayores y al más veterano se le suele dar una copa. Así que siempre me la suelo llevar yo».

Querido en la ciudad, la delegada de Deportes, Ainhoa Gil, expresó el pésame a todos los familiares y amigos del deportista, anunciando que con motivo de la celebración de la XXXI Carrera Popular Ciudad de Jerez, el próximo domingo, se guardará un minuto de silencio en su memoria. La delegada señala que Paco era «un hombre muy querido por todo el mundo del deporte, y un gran ejemplo para los niños y jóvenes, ya que a pesar de su edad siguió compitiendo y practicando su afición deportiva preferida, el atletismo hasta que su estado de salud se lo impidió», añadiendo que representa «el espíritu deportivo, el esfuerzo y el afán de superación, y se ganó durante muchísimos años el respeto de todos los clubes y deportistas de la provincia, de las instituciones y de todos los que lo conocimos». Además de ser reconocido como veterano atleta, Castillo también fue un reconocido militante sindical y político.