«Este país está maldito»
Actualizado: Guardar«La gente todavía no se lo cree. Muchos saben que es cierto lo que ha ocurrido, pero no lo pueden asumir. Este país está maldito», grita Pawel Zralek, un ciudadano de 64 años que se ha concentrado, junto con miles de personas, frente al palacio presidencial, en la elegante calle Krakowskie Przedmiescie de Varsovia. Otros tampoco acaban de asimilar algo tan doloroso. Ágata, una joven de 22 años, no para de llorar y le pide a Dios que «ampare a Polonia y la ayude a superar esta tragedia».
La gente se pregunta por qué otra vez Katyn, en tierras de Rusia, donde las autoridades polacas tenían que rendir un homenaje a sus 22.000 compatriotas, principalmente militares, asesinados por la Policía política de Stalin en 1940. «Katyn es una tierra maldita para los polacos», clama una mujer mayor. Entre los concentrados había personas de todas las edades y condición social con banderas nacionales, que depositaron velas y ramos de flores cerca de la verja de entrada del palacio presidencial.
