El fiscal y la acusación popular se oponen a que Otegi quede libre

La Fiscalía de la Audiencia Nacional y la asociación Dignidad y Justicia se opusieron ayer a que Arnaldo Otegi salga de prisión en situación de libertad condicional, como solicitó el ex portavoz de Batasuna el pasado 15 de marzo debido a la precaria salud de algunos familiares.

Las acusaciones justificaron su postura ante la Sala de lo Penal por dos motivos: la reiteración delictiva de Otegi y su «elevado» riesgo de fuga. El dirigente de la izquierda abertzale tiene abiertas varias causas en la Audiencia Nacional, y el juicio que está más próximo, sólo falta fijar la fecha, es por el sumario en el que están procesados 41 dirigentes de la izquierda abertzale por la supuesta financiación de ETA a través de las 'herriko tabernas'.

La defensa de Otegi trasladó una providencia a la sala en la que pedía su libertad provisional por razones de arraigo social, situación personal y familiar y porque entendía que el riesgo de fuga había desaparecido. El escrito argumentaba que el ex portavoz de Batasuna es hijo único y que, debido al precario estado de salud de su padre, su ayuda es «imprescindible». Asimismo, alegaba que su mujer sufre un aneurisma en una arteria cerebral y necesita asistencia, y su hija de 14 años se encontraba en tratamiento psicológico originado por la detención de su padre.

El fiscal rechaza esta pretensión y recuerda que Otegi ya quebrantó la medida cautelar que le prohibía salir del país, ya que el año pasado se desplazó a Francia «en al menos dos ocasiones» para mantener contactos con miembros de ETA, según reveló el auto que dictó el juez Baltasar Garzón el pasado 16 de octubre, cuando envío al dirigente de la extinta Batasuna a la cárcel por intentar reconstruir ese partido a través de la marca 'Bateragune'.

La asociación Dignidad y Justicia recalca, además, que en los sucesivos autos contra Otegi se recogen referencias al riesgo de reiteración delictiva mediante la comisión de actos en favor de Batasuna o ensalzando a terroristas presos, caso de José María Sagarduy, un hecho que le acaba de costar dos años de prisión por enaltecimiento.