La provincia superó en un 200% el volumen medio de lluvia que cae en un año

Excepcional, sin antecedentes históricos y de intensidad desconocida. Esos son los apellidos que los técnicos de la Junta han colocado al temporal en el informe que el pasado martes presentó Griñán al presidente del Gobierno. Se trata del resumen de tres meses en los que la crónica meteorológica diaria empieza con el manido recurso de «la lluvia no da tregua». Y no por recurrente deja de ser cierto y conlleva daños en carreteras, playas, cultivos agrícolas, explotaciones agrarias y núcleos urbanos. El resumen del documento recoge que Andalucía ha superado en más del 150% la precipitación media acumulada. Y en casos como la provincia llega al 200%. Ahí está el ejemplo de Grazalema, la zona más lluviosa de España, que ya lleva en lo que va de año 2.300 litros por metro cuadrado.

El estado de los embalses resulta especialmente llamativo pasando del 32% de agua almacenada al 90% en sólo dos meses. Y todo ello es producto de una gran cantidad de lluvia, caída de forma torrencial en muchas ocasiones.

El informe coloca a Cádiz en todas las listas prioritarias: Desbordamientos, inundaciones, cortes de carreteras y operativo movilizado. Precisamente, fue una de las provincias con mayor número de incidencias en las dos embestidas fuertes del temporal: Navidad y finales de febrero.

En toda Andalucía, más de 70 municipios han sido víctimas de graves daños y en ellos ha sido necesario desalojar en torno a 700 viviendas. El balance más desolador son las 2.000 personas que han tenido que abandonar sus hogares por riesgo de riada o desperfectos que amenazaban su seguridad.

Este documento, que se lleva redactando desde el pasado febrero, no llega a ponerle una cifra a los daños totales, pero calcula que son millonarios. Sólo en lo que respecta a la agricultura se han perdido entre cuatro y cinco millones de salarios y ha aumentado un 22% la mortalidad del ganado.

La pesca también ha sufrido un duro revés, especialmente durante la pasada Navidad, con la flota amarrada en una de las fechas de mayor salida del género.

Ahora, mientras la provincia se recupera de la última borrasca y el norte de España sufre los efectos del nuevo frente frío, los desperfectos en las carreteras siguen causando estragos. Son más de 253 vías que se han visto afectadas en toda Andalucía, un 53% del total de la red autonómica. Sólo en la provincia se llegaron a cortar en un día hasta 30 accesos. Sin contar aquella jornada del 21 de febrero en la que quedaron fuera de servicio el tren, el aeropuerto y la autopista con Sevilla.