La famosa pieza de Costus, fechada en 1986, a la que se perdió la pista en 1998. :: LA VOZ
Sociedad

Cádiz no se olvida de 'Los Mojosos'

Veinticinco artistas gaditanos exigen al Ayuntamiento que investigue la 'volatilización' de la obra La APC acoge una muestra protesta sobre la desaparición del cuadro de Costus

CÁDIZ. Actualizado: Guardar
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El 'expediente X' empezó el 22 de enero de 2007, cuando el escritor Javier Osuna revolvía papeles en el Archivo Histórico Municipal mientras investigaba sobre el Tío de la Tiza. Tras varias tediosas horas repasando documentos antiguos, un técnico amigo suyo le pidió ayuda para hacer inventario de unas obras que habían traído de la Fundación gaditana del Carnaval, ubicada entonces en la misma calle, Isabel La Católica. Eran seis piezas de Costus, los pintores de 'la Movida', que pertenecían a una serie sobre la gran fiesta gaditana fechada en 1986.

Los títulos respondían a los nombres de diversas agrupaciones: 'Los pipiolos', 'Viaje al centro de la mierda', Los leones de Correos', 'Pasión carnavalera', 'Los burros de la clase', 'Las canteras'... pero faltaba una. La información que tenía Osuna indicaba que había otra pieza más, 'Los Mojosos', que no se encontraba allí. «Eran cuadros que habían estado colgados de las paredes de la Fundación, algunas incluso a la vista de los autores que acudían a inscribir a sus agrupaciones», apunta el escritor. «Todas ellas, pintadas por Enrique Naya en 1986, ilustraron los carteles y las actas de los Congresos del Carnaval que se celebraban en la ciudad».

Osuna denunció la desaparición del cuadro y desde entonces sólo ha recibido silencio por parte del Ayuntamiento. Preguntados una y otra vez en Pleno por la concejala del PSOE, Marisa de las Cuevas, el equipo de Gobierno sólo ha alegado que una Comisión de Investigación se está ocupando del asunto, pero «no hace más que dar largas», apunta el escritor.

Indignado por el asunto y apoyado por un colectivo de escritores y pintores gaditanos, ha organizado una exposición protesta que mañana verá la luz en la sede de la Asociación de la Prensa. Bajo el lema 'Los Mojosos quieren volver a casa' , 25 artistas han versionado la famosa obra 'volatilizada' aportándole sus propias señas de identidad. «Si esto ha tenido algo de bueno, es que han surgido 25 nuevas obras de arte», sentencia Osuna, que busca el apoyo de la ciudadanía con esta iniciativa. «Nosotros tenemos que pagar nuestros impuestos, así que el Ayuntamiento nos debe por lo menos una respuesta» en relación a la pérdida de esta joya del patrimonio gaditano. Así, Alberto Bermúdez, Amalia Quirós, Benítez Gabriel, Candi Garbarino, Diego Vera, Emilio Santander, Eva Arango, Guillermo Márquez, Iñaqui Blanco, Jasama Masaja, José Alberto López, José Díaz Cardero, Juan Candón, Juan Fernández Caamaño, Kiki, Lo Herrera, Lolo Pavón, Lolo Tirado, Mel, Migita Dakota, Patricia Garzón, Pepe Marchena, Pilar Aixado y Thomas Vegas se suman al propio Javier Osuna en esta muestra protesta.

También resulta contradictorio, según el escritor, que el Ayuntamiento haya nombrado a Enrique Naya y a Juan Carrero, Costus, 'Hijos Predilectos de la Ciudad de Cádiz' e incluso haya comprado su colección 'El Valle de los Caídos' y no mueva cielo y tierra para desentrañar este curioso misterio.

Osuna tiene sus propias sospechas acerca del paradero de la obra, cuya pista se pierde en el año 1998. «Tengo cierta información que indica que las pinturas salían de allí cuando se iban a utilizar para ilustrar las portadas de las actas y se llevaban a la imprenta, lo cual me parece una mala praxis». Jiménez-Mena, la imprenta que trabajaba para el Consistorio, certificó en su día que la obra no estaba en su poder. Ahí es donde el rastro se pierde. «Sinceramente, no sé que pudo pasar, pero creo que tuvo su buena dosis de negligencia», sentencia el escritor.

Mientras el misterio se aclara -si es que algún día lo hace-, una veintena de artistas locales piden a los gaditanos que no se olviden de esta importante pieza de su patrimonio y exijan que la desaparición se esclarezca. Y lo hacen como mejor saben: pincel en mano.