Otra inyección americana

Fortísimas subidas en los índices de renta variable. Sobre todo en el Ibex-35, que ganó un 2,85%, para dar un último cambio en los 8.628,10 puntos. Le siguió, pero de lejos, el Ftse Mib de Milán, que avanzó un 1,61%. El Cac 40 francés, por su parte, ganó un 1,22%. También el PSI-20 de Lisboa ganó más de un punto porcentual. Atrás se quedaron otros indicadores, como el Ftse 100 británico, que ganó un 0,69%, y el Dax alemán, que se apuntó un 0,59%.

Desde por la mañana el selectivo español estuvo en positivo. Comenzó la sesión en los 8.450 puntos y fue a por los 8.500 puntos. Pero a partir de las dos y media de la tarde inició un nuevo y mucho más poderoso 'rally' hasta alcanzar los 8.628,10 puntos al cierre. Sin duda, durante el primer tramo de la sesión, lo que ayudó a la renta variable española fue la fuerte caída de la prima de riesgo. A la una de la tarde había caído de los 348 hasta los 327 puntos básicos. A las dos y media de la tarde marcaba los 320 puntos básicos. Y dio un último cambio en los 323 puntos básicos (331 puntos básicos, según Infobolsa), en mínimos desde marzo del año pasado. La rentabilidad del bono español a diez años cayó hasta el 4,74% (4,85%, según datos de Infobolsa), con lo que ya se coloca en niveles de noviembre del año 2010.

La prima de riesgo de Italia también bajó: de los 310 puntos hasta los 307. Pero llegó a marcar mínimos en los 298 puntos básicos a las tres de la tarde.

Este comportamiento de la deuda española y de la deuda italiana hizo posible que la prima de riesgo de España con respecto a Italia se estrechara hasta los 15 puntos básicos. En cualquier momento, se da la vuelta. Tras el cierre de la sesión, Fitch rebajó la calificación crediticia de Italia hasta BBB+ con perspectiva negativa.

Buen informe de empleo en Estados Unidos

Pero, ¿qué ocurrió a las dos y media de la tarde para que las primas de riesgo reaccionaran tan bien, al igual que la Bolsa? En Estados Unidos se publicó el informe oficial de empleo. Y fue muy positivo. Durante el mes de febrero se crearon 236.000 nuevos puestos de trabajo en la economía no agrícola, muy por encima de los 165.000 que habían previsto los expertos consultados por Bloomberg. Aunque la cifra del mes anterior se revisó a la baja desde los 157.000 hasta los 119.000. En el sector privado, se crearon 246.000 nuevos puestos de trabajo, por encima de los 170.000 estimados. Y en el sector industrial, 14.000, por encima de los 9.000 esperados. Con ello, la tasa de paro bajó dos décimas por sorpresa, hasta el 7,7%. Y la tasa de subempleo bajó una décima, del 14,4% hasta el 14,3%.

El Dow Jones comenzó la sesión al alza, pero también flaqueó. Las buenas noticias, cuando son demasiado buenas, como ésta, provocan temores. Por ejemplo, a que la Reserva Federal norteamericana eche el freno a sus políticas expansivas. De hecho, José Luis Martínez Campuzano, estratega de Citi, comenta: "Estoy convencido que estos datos van a dar pie a un fuerte debate en las próximas semanas sobre el margen de maniobra que tiene la Fed para mantener la política monetaria actual. No se confundan: no se trata de reducir el balance; tampoco de subir los tipos. Más bien de poner un calendario para dejar de comprar activos y adelantar un plan futuro para deshacerse de ellos".

De hecho, el dólar se reforzó con mucha fuerza tras conocerse el dato o, lo que es lo mismo, el euro cayó: de niveles por encima de 1,31 unidades, hasta tentar el nivel de 1,2950 unidades. Además, la rentabilidad del bono estadounidense a diez años subió, hasta superar el 2%. Aunque también subió el interés de su equivalente alemán: desde el 1,499% hasta el 1,523%. Por lo tanto, quizás este movimiento en las deudas más seguras se debiera únicamente a la menor aversión al riesgo existente en el mercado.

En el mercado de materias primas, también cotizó la próxima estrategia de salida de la Fed y no los síntomas de mejora de la situación económica: el precio del crudo cayó. El barril de Brent, de referencia en Europa, bajó un 1,08%, hasta los 109,95 dólares. El barril de West Texas, de referencia en Estados Unidos, cayó un 0,44%, hasta los 91,16 dólares. El oro, mientras tanto, se mantuvo estable en los 1.575 dólares.

Además, conocimos cifras de inventarios al por mayor, que crecieron un 1,2% en enero, por encima del 0,3% previsto.

También conocimos datos en Europa. En España en particular, la producción industrial, que cayó en enero un 5%, un punto menos de lo previsto.

Sólo tres valores en negativo

En el selectivo español, únicamente tres valores cerraron la sesión en rojo: BME, que retrocedió un 1,28%; y CaixaBank y Ferrovial, que se dejaron un 0,16% cada uno.

En el otro lado de la tabla, FCC, que se disparó un 7,09%. Y algo tuvo que ver Realia, su participada, convertida en la mejor compañía de la Bolsa española, con una revalorización del 17,88%. La inmobiliaria estaría a punto de cerrar un acuerdo de refinanciación de su deuda que vence el 27 de marzo y que asciende a 847 millones de euros.

Tras FCC, tres bancos: Sabadell, Popular y Bankinter, que ganaron un 5,40%, un 4,96%, y un 4,77%, por ese orden. Acciona, Indra, Telefónica y BBVA subieron más de un 4%. Entre los grandes, también destacaron Iberdrola, Repsol y el Santander, que sumaron revalorizaciones de más de un 3%.

En el Mercado Continuo, el peor fue Pescanova, que retrocedió un 10,40%, seguido de Biosearch, que retrocedió un 7,89%, mientras que Urbas se dejó un 6,67%.