Mengual culpa a Tarrés de su retirada

Continúa el culebrón en la natación sincronizada española, conmocionada aún por el despido de la exseleccionadora Anna Tarrés o la salida repentina de la capitana Andrea Fuentes. Hace un año, Gemma Mengual sorprendió a propios y extraños cuando anunció su adiós definitivo de las piscinas. Con 34 años, veinte de ellos en la selección nacional y, a las puertas de los Juegos Olímpicos de Londres, uno de los mitos vivientes del deporte español colgaba el traje de baño porque la natación sincronizada, decía entonces, ya no le motivaba ni le hacía feliz. «Algo en mí me decía que ya no me llenaba como antes; ya no me sentía realizada», confesó entonces. La verdad era otra y ha preferido guardársela durante un año para no perjudicar al equipo.

Después de volver a la alta competición tras ser madre, Mengual aseguró este miércoles que Anna Tarrés no le puso las cosas nada fáciles. «Me encontré con una pared», dijo. «Competir me hacía feliz, pero encontrarme con un muro no me compensaba. Me hacía sentir muy mal», afirmó durante la presentación de un libro, ‘El agua o la vida’, en el que repasa toda su vida dedicada a la ‘sincro’. De alguna manera, Mengual se sintió decepcionada por su entrenadora, la persona que le había llevado hasta la cima y le permitió colgarse dos platas olímpicas; un oro, doce platas y siete bronces en Mundiales; y cinco oros, nueve platas y tres bronces en Europeos. «No encontré el apoyo que esperaba cuando decidí volver a las piscinas. No lo digo desde el rencor», señaló. Y es que Tarrés, que tras su salida del equipo español trabaja ahora en un programa de televisión, «era una parte muy importante» de su vida. Hasta el punto que la tenía muy controlada y debía pedirle permiso para todo.

A Mengual le hubiera gustado despedirse del deporte de otra manera, porque considera que podía haber dado más de sí en el agua. «Podría haber llegado a las Olimpiadas de Londres (en 2012) y a los Mundiales de Barcelona (2013), pero cuando después de regresar a entrenar me encontré con lo que me encontré, lo dejé», aseveró. Su idea era poner punto final en los Mundiales de Barcelona de este verano y cerrar el círculo más virtuoso de la ‘sincro’ española, un periodo de éxitos que nació hace diez años en unos Mundiales que también se celebraron en la capital catalana y donde Mengual entró de lleno en la élite, con un bronce en la prueba de ‘solo’ y otro tercer puesto en dúo junto a Paola Tirados. «Me da nostalgia el hecho de pensar que si todo hubiera ido bien me podría haber retirado en mi ciudad. Estaré ahí de otra manera, pero no me podré despedir compitiendo», concluyó. Mengual estará presente en julio en la piscina Bernat Picornell, aunque ya no en el agua, sino como asesora artística del nuevo equipo técnico dirigido por Esther Jaumà.