La sombra del dopaje se cierne sobre el olimpismo español

De nuevo la sombra del dopaje se cierne en el panorama deportivo español. En esta ocasión, y con la inminente celebración de los Juegos Olímpicos, las sospechas caen sobre Ángel Mullera, atleta catalán que participará en la prueba de 3.000 metros obstáculos en la cita de Londres. La información la sacó a la luz el diario deportivo ‘As’ este jueves y posteriormente fue completada por ‘El País’.

El mediofondista habría intercambiado una serie de correos electrónicos, a partir de agosto de 2011, con la dirección profesional@hotmail.com donde pedía consejo sobre la toma de complementos alimenticios prohibidos para mejorar el rendimiento.

En los ‘emails’ Mullera pregunta sobre las sustancias que mejorarían su rendimiento y las posibilidades de que sean detectadas en un control antidoping. "Dos semanas antes de la competición parar de poner Mircera, ¿no? ¿Pero si me hacen un control sorpresa de orina a los 3 días de haber acabado con la Mircera ¿qué pasa?", comentó el atleta al preparador. Este le respondió: "Dos meses antes de la competición, Mircera, 50 ui por kilo de peso tres veces por semana y antes de la competición Dynepo y Glutamina para eliminar rastros de EPO. Este sería el plan". "No tendrías problemas con los controles", le aseguró el entrenador. El atleta llegó incluso a enviarle sus datos: “De hematocrito ya te he comentado que no bajo de 45..46-47, de hemoglobina 15,5-16...lo otro ya miraré en casa”.

Posteriormente, al atleta se le recetó un plan para los 13 días previos a una competición que incluye tres dosis de Mircera, una de Dynepo y productos legales como Tationil y Glutamina (antioxidantes) o Ferranin (hierro). Meses después, fue en la reunión de Barcelona donde realizó una marca de 8:16.47 minutos el pasado 8 de julio de 2012, demostrando un gran momento de forma. Al día siguiente fue incluido en la selección olímpica que competirá en Londres.

Ángel Mullera fue el primero en hacerse eco de la información a través de su cuenta de Twitter, @AmulleraR, donde manifestó estar “muy tranquilo” tras la noticia aparecida. Después habló para Catalunya Radio donde reconoció que, a través de correo electrónico, habían contactado con él, pero que no “había aceptado nada”. "Hablaré con mis representante para ver qué sucede. Todo es mentira. No tengo plan de dopaje ni nada. No lo entiendo. Estoy enfadado”, insistió en la emisora de radio.

Una denuncia anónima puso hace unos días estos correos electrónicos en manos de la Policía y los Mossos de Esquadra , que continúan con la investigación. La Real Federación Española de Atletismo (RFEA) y el Consejo Superior de Deportes (CSD) conocían, desde principios de 2012, de la existencia de los emails, sin embargo, no habríeron diligencias policiales al no tener los correos electrónicos fuerza jurídica. “Solo valen los controles antidopaje”, comentó la Federación.

El COE, por su parte, aseguró que el atleta no dio positivo en los controles antidopaje de orina y sangre a los que se ha sometido antes de los Juegos Olímpicos.