Pablo Triana. / Archivo
análisis

¿Y quién rescata al bono del Tesoro?

La dependencia de la deuda con los bancos españoles ha sido citada por Moody´s como uno de los motivos para bajar el ‘rating’

PROFESOR DE ESADE BUSINESS SCHOOL Actualizado: Guardar
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A veces lo obvio se cumple. Si un país en mala situación económica y con fuertes desequilibrios fiscales, que roza la calificación de bono basura y sufre un ratio de deuda pública sobre el PIB de casi el 70% se endeuda en (parece) 100.000 millones de euros más, no sería irrazonable asumir que la percepción externa de su riesgo crediticio se viese deteriorada. Más aún cuando ese préstamo no se va a utilizar para crear un Silicon Valley en Valladolid, con lo que ello acarrearía en términos de crecimiento y saneadas perspectivas futuras, sino para cubrir los agujeros dejados en los bancos por una burbuja especulativa destructiva e improductiva. Y más aún cuando es muy posible que el nuevo préstamo oficial subordine a los acreedores privados, poniéndoles por detrás en la cola a la hora de cobrar. Y todavía más aún cuando los bonos de gobiernos Euro van a incluir Clausulas de Acción Colectiva como las que sirvieron para forzar a los tenedores privados de bonos de Grecia a sufrir quitas de más del 50%.

Por todo esto, no extrañó mucho que el martes el mercado demandase un retorno récord (por elevado) a los bonos españoles, ni que Moody´s haya decidido el miércoles acompañar a Fitch y considerar al Reino de España como deudor al borde del peor nivel crediticio. La pregunta obvia es: ¿alguien va a seguir comprando bonos de España?

Por ahora ha habido un comprador fiel: los bancos españoles. Pero curiosamente esa dependencia ha sido citada por Moody´s como uno de los motivos para bajar el ‘rating’. Las agencias querrían ver a otros comprando bonos. España corre peligro de acabar dependiendo casi exclusivamente (o exclusivamente) de la financiación oficial. Incluso los bancos que compran deuda del Tesoro lo hacen en gran medida con fondos provenientes del BCE. Y Moody´s lo tiene claro: al igual que pasó en Grecia, tanta dependencia del dinero oficial puede acabar desembocando en una reestructuración de deuda que incluya grandes pérdidas para los acreedores no oficiales. Por lo tanto, le dice Moody´s al mundo, mucho ojo con las obligaciones del Reino de España.

Intentemos ser optimistas. Es posible un análisis que conduzca a un inversor a prestarle a España. Se asume que la resolución del problema bancario (que en España es también público) está mucho más cercana. El nuevo préstamo del EFSF y/o del ESM será a un tipo de interés muy favorable, aligerando el coste de la tarea de limpieza. Y la Eurozona ha dado una señal inequívoca de respaldar a sus miembros más frágiles. No olvidemos que la a veces tan denostada Alemania garantiza el 29% de los fondos del EFSF y aportará el 27% del capital del ESM. España tiene problemas, pero gente muy poderosa está en su esquina.