Un 'siete' del Valencia para jugársela en Londres

Con Soldado reclamando a base de goles un billete para la Eurocopa y la contundente pegada de un equipo que sigue creciendo, el Valencia también quiso dar un golpe de autoridad en la 'Champions', aunque el Chelsea perdió en Leverkusen y los 'che' deberán jugarse el pase a octavos de final en Stamford Bridge. El cómodo partido ante el Genk sirvió para comprobar la evolución del Valencia, y la de Soldado, que con un 'hat-trick' confirmó que está ansioso por convencer a Del Bosque, y no deja de reivindicar un sitio en la selección española.

El delantero valenciano fue el encargado, con la colaboración de Jonas, su mejor socio, de sentenciar en poco más de media hora al débil Genk y convertir la inquietante visita de los belgas en un encuentro muy plácido y despejar el cambio del Valencia a octavos.

Sin embargo, del festival goleador, sin un ápice de relajación del Valencia, también participaron, el propio Jonas, y después de su marcha, Pablo Hernández, Aduriz y Tino Costa, el gran centrocampista que ha hecho olvidar a su compatriota Banega. El ambicioso equipo de Unai Emery disfrutó e hizo disfrutar a su exigente afición con una actuación sobresaliente, ante un pobre rival, pero con fútbol de toque y ataque, y con una gran efectividad en la primera parte. Si el 6 de diciembre el Valencia empata con goles en el campo del Chelsea estará en octavos. La posibilidad es por tanto muy factible.

Su superioridad frente al Genk fue insultante, sus ganas de vengarse del empate sufrido en Bélgica más que evidentes, y el Valencia se quedó así a un solo tanto de la mayor goleada en la historia de la Liga de Campeones. Igual que Jonas rozó el récord de gol más tempranero en poder de Makkay, el Valencia acarició el 8-0 del Liverpool al Besiktas. Lo impidió el portero del Genk, que aunque se llevó un 'siete' evitó al menos otros dos goles, frente a un Valencia que no acusó el error cometido al principio con los dorsales, porque Emery quería alinear a Piatti en vez de a Feghouli, y cuando se rectificó la UEFA ya no lo permitió. Al Valencia le dio igual, porque con la conexión Jonas-Soldado destrozó al Genk, y Emery, que cada vez parece convencer más a Mestalla, incluso pudo permitirse variantes tácticas cuando salió Parejo. Este Valencia tiene recursos y mimbres para llegar lejos, aunque deberá confirmarlo y ganarse el sufrido premio en terreno del Chelsea.