Turismo y fe, cada vez más unidos

Un país sembrado de iglesias, monasterios y catedrales. Una tradición que toca las cuatro esquinas de la península ibérica y un legado cultural de valor incalculable. Todo ello son claves que han conseguido situar a España como uno de los países con más potencial para el desarrollo del turismo religioso.

La fe se convierte así en una importante fuente de ingresos a la que se le puede sacar mucho partido. Por ello, aprovechando que con la visita de Benedicto XVI a nuestro país para participar en las Jornadas Mundiales de la Juventud llegarán miles de personas, el Instituto de Turismo de España ha realizado tres nuevas propuestas que complementan su oferta de viajes religiosos.

La Ruta Mariana, recorre tres importantes santuarios. La primera parada tiene lugar a orillas del Ebro, en Zaragoza, con la visita del que se conoce como primer santuario mariano del mundo, Nuestra Señora del Pilar. El siguiente alto en el camino nos lleva hasta el Santuario de Torreciudad, en Huesca, desde donde es posible la visita de otras iglesias y catedrales, así como otros lugares de interés como el Parque Natural de la Sierra y los Cañones del Guara. El último enclave de la ruta está situado en Barcelona y se trata del Santuario de Montserrat.

La Ruta de los Tres Templos, en el País Vasco, es la segunda de las propuestas que ofrece la página web del Instituto de Turismo de España y que engloba el Santuario de Loyola, la Ermita de Santa María la Antigua y el Santuario de Aránzazu. La última de las rutas que se recomiendan tiene lugar en la capital durante el mes de agosto. Madrid Pontificio propone un recorrido por la Basílica de San Miguel o la Catedral Castrense, ambos templos relacionados con el pontificado romano.

Peregrinaciones a medida

Además, existe la opción de contratar los servicios de agencias especializadas en este sector. En HPS son expertos en organizar viajes religiosos al gusto. La empresa se encarga de preparar todos los detalles; alojamiento -en ocasiones, si el grupo lo desea, puede tener lugar en monasterios o casas espirituales-, servicios religiosos, guía, etc.

“Recibimos llamadas desde todo el mundo pero el público más asiduo es el norteamericano, ya que allí existen un gran número de agencias especializadas en este tipo de excursiones”, aseguran. El público que demanda estos servicios es, en general, variado, pero destacan los jubilados y los jóvenes.

Pero no solo se ofrecen opciones para aquellos que vienen, también existen otras empresas que buscan alternativas para los que se interesan por lugares menos frecuentes como por ejemplo, los Santuarios Bálticos o la Armenia cristina.

Y aunque la ciudad santa de Santiago de Compostela, la Romería del Rocío o la tradicional Semana Santa seguirán siendo los puntos clave de este sector, las posibilidades siguen aumentando. El gran interés que el patrimonio religioso despierta en el turista y la gestión de nuevas oportunidades de negocio y desarrollo local serán, entre otros, algunos de los puntos clave que se discutirán en el VII Congreso Internacional de Turismo Religioso, que tendrá lugar del 24 al 26 de agosto en Córdoba.