Vista de la prisión donde permanece encarcelado el autor confeso del doble atentado. / Reuters
Conmoción en noruega

Breivik se entregó con los brazos en alto

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El autor confeso del doble atentado ocurrido en Noruega el pasado viernes, Anders Behring Breivik, tiró su arma y alzó sus manos en señal de rendición cuando la Policía se acercó a él en la isla de Utoya, donde llegó a matar a tiros a 68 personas, según uno de los agentes implicados en el operativo, Jacob Bjertnaes. Hasta ahora, los policías que llegaron en primer lugar a Utoya han guardado silencio sobre su intervención, que se produjo, según ha explicado Bjertnaes, en dos grupos de cinco agentes cada uno. La primera unidad se desplazó al norte de la isla y la segunda hacia el sur, donde se encontraba el agresor.

Bjertnaes, que no ha querido entrar a valorar los supuestos errores cometidos por las fuerzas de seguridad, ha explicado que su grupo corrió "inmediatamente" hacia el sur de la isla, donde dispararon para llamar la atención de Breivik cuando se encontraban a 350 metros de distancia de él y aprovechando que no había otras personas en las inmediaciones.

"De repente, el agresor se paró ante nosotros con sus manos sobre la cabeza", ha dicho el policía. "El arma se encontraba en el suelo a unos 15 metros de él", ha añadido. La unidad policial se organizó entonces de tal forma que uno de sus componentes se asegurase de que Breivik no podía escapar mientras los restantes acudían en auxilio de las víctimas. Unas 650 personas, en su mayoría jóvenes, se encontraban en la isla de Utoya dentro de un campamento de verano organizado por el Partido Laborista.

Víctimas entre 14 y 19 años

La mayoría de las víctimas identificadas oficialmente del doble atentado de Noruega tenía entre 14 y 19 años, según la lista con los primeros 17 nombres dados a conocer por la policía, del total de 76 personas fallecidas en los ataques. Hasta ahora, la víctima más joven es una muchacha de 14 años, muerta en el ataque al campamento juvenil de la isla de Utøya, mientras que los mayores son una mujer de 43 años y un hombre de 51, quienes se encontraban también entre los asistentes a ese encuentro anual de las juventudes socialdemócratas.

La policía difundió ayer los cuatro primeros nombres, de los cuales tres correspondían a las víctimas del atentado precedente en el complejo gubernamental de Oslo. A esos primeros nombres siguieron hoy otros trece, en su mayoría correspondientes a los fallecidos en la isla, donde hasta ahora se han contabilizado 68 víctimas.

La policía noruega se propone difundir los nombres, edad y lugar de residencia de la totalidad de las víctimas, de acuerdo al proceder habitual noruego, en cuanto hayan sido formalmente identificadas y se haya informado asimismo a sus familias. El primer ministro noruego, Jens Stoltenberg, anunció hoy que se investigará en profundidad la actuación policial, mientras crecen las críticas por su supuesta falta de coordinación o diligencia.