Noruega reforzará su cuerpo policial tras el doble atentado

Noruega ha decido reforzar la seguridad de sus calles, en concreto, las de Oslo. Y es que su cuerpo policial y el del distrito donde tuvo lugar el sangriento tiroteo del viernes recibirán 2,6 millones de euros para crear cien nuevos puestos de trabajo. Así lo ha explicado Gry Joruhn Holmen, un portavoz del sindicato policial Politiets Fellesforbund, que ha explicado que "el ministerio de Justicia ha aceptado desbloquear 20 millones de coronas para que se creen 100 puestos suplementarios" que serán atribuidos a "diplomados de la escuela de policía que por el momento no han encontrado empleo".

"El ministerio de Justicia aceptó desbloquear 20 millones de coronas para que se creen 100 puestos suplementarios" que serán atribuidos a "diplomados de la escuela de policía que por el momento no han encontrado empleo", declaró a la AFP Gry Jorunn Holmen, una portavoz del sindicato Politiets Fellesforbund.

El primer ministro noruego, Jens Stoltenberg, ha afirmado que "tras la investigación policial" de los atentados de Oslo, en los que murieron 76 personas, y "tras confortar y asistir" a las víctimas, se analizará la reacción que tuvieron las fuerzas de seguridad ante la crisis. Stoltenberg hizo estas declaraciones en una rueda de prensa ante medios extranjeros, al ser interrogado si estaba satisfecho con la actuación de la policía y ante las crecientes críticas de los últimos días.

Además, Stoltenberg, ha ratificado que su país "no se va a dejar intimidar por los ataques". En una rueda de prensa ante medios extranjeros, Stoltenberg ha agregado que la sociedad noruega va a mantenerse firme para defender sus valores y que la respuesta a la "brutal violencia" seguirá siendo la defensa de "la libertad, la apertura, la tolerancia y la "democracia".

Tras agradecer las muestras de solidaridad "llegadas de todas partes del mundo, de cada esquina de nuestro país", el primer ministro socialdemócrata añadió que el desafío de Noruega en estos momentos de "inconmensurable dolor" es encontrar un camino "entre la tristeza y la esperanza".

La prioridad en estos momentos es "darnos y dar consuelo", insistió, y levantarse de esta "tragedia nacional" con un mensaje positivo, una llamada a una "mayor participación política" y un "aún mayor compromiso con la democracia".

Stoltenberg ha recordado que la isla de Utoya, donde se produjo el segundo ataque con un total de 68 muertos, era "la cantera de nuestros mejores talentos políticos", en alusión al campamento de las juventudes socialdemócratas que se celebra ahí todos los años. Recordó a este respecto el primer ministro que él mismo había visitado esta isla "todos los años", desde 1976.

Apoyo frente a las críticas

Por su parte, el ministro de Justicia, Knut Storberget, ha declarado después de reunirse con los responsables de las fuerzas especiales, que los agentes que acudieron a la isla de Utoya tras el tiroteo son "héroes" que realizaron su trabajo de forma correcta. "Les he llamado anteriormente héroes y son nuestros héroes. Esos a los que he visitado hoy son los que estuvieron en primera línea y los que ayudaron a recobrar el control en un situación muy complicada", aseguró Storberget.

Además, ha agregado que Noruega "debería sentirse orgullosa" de esta unidad especial y de cómo realizó su trabajo, y subrayó que con su visita quería mostrarles a estos agentes su "reconocimiento" y "apoyo" frente a las críticas.

Las fuerzas de seguridad noruegas han sido criticadas en los últimos días por su respuesta a los ataques del pasado viernes y, especialmente, por la lentitud con la que acudieron a la isla de Utoya, a 40 kilómetros de Oslo. Breivik abrió fuego contra decenas de personas en un campamento de las juventudes socialdemócratas en la isla y acabó matando a 68 personas, en su mayoría jóvenes y adolescentes. El coche bomba que había explotado una hora y media antes en Oslo dejó ocho muertos.

Sin helicóptero por los recortes

Pese a los avisos telefónicos que recibió la policía desde el comienzo del tiroteo, el ultraderechista dispuso de una hora para perpetrar la matanza que había planeado durante años. Esto se debió en parte a que las fuerzas especiales a las que visitó Storberget tuvieron que desplazarse primero por tierra y luego en barca para llegar a la zona, en lugar de recurrir al helicóptero del cuerpo, que no estaba disponible.

Un informe interno de la policía noruega difundido hoy por la televisión pública "NRK" apunta que los recortes económicos de los últimos años afectaron a la operatividad de su helicóptero. El documento revela que, debido a dificultades financieras de los últimos ejercicios, la policía redujo este año a 900 las horas de operatividad anual del único helicóptero del cuerpo, menos de tres horas al día de media. "A día de hoy no tenemos la capacidad que de que disponíamos hace unos años", reconoció a la "NRK" el policía Anstein Gjengedal, responsable de esa partida presupuestaria.

Por su parte, el responsable del operativo policial, Johan Fredriksen, aseguró que la polémica en torno al helicóptero está "sacada de contexto" y que el aparato fue empleado en la operación, aunque como "parte del operativo de búsqueda" de las víctimas. No obstante, reconoció que habría que "replantear la capacidad" de este medio aéreo policial.

El director de la policía noruega, Oystein Maeand, ya se escudó en la "confusión" reinante en la isla en los primeros momentos para justificar la reducción de la cifra de fallecidos de 93 a 76 personas el lunes, cuatro días después de la doble tragedia.