Los restos del F-15 de EEUU que ha caído en suelo rebelde, posiblemente por un fallo mecánico. / Reuters
operación amanecer de la odisea

Obama y Sarkozy logran pactar el papel de la OTAN

EEUU y Francia alcanzan un acuerdo sobre el modo en que las estructuras de mando de la Alianza deben apoyar la intervención

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Francia, Reino Unido y EEUU se han puesto de acuerdo en que la OTAN desempeñe "un papel clave" en la estructura de mando de las operaciones militares en Libia, según ha informado la Casa Blanca.

El consejero de Seguridad Nacional adjunto, Ben Rhodes, ha explicado que el presidente estadounidense, Barack Obama, de gira por América Latina, ha hablado por teléfono con su homólogo francés, Nicolas Sarkozy, y con el primer ministro británico, David Cameron, sobre la marcha de las operacione. Previamente, había mantenido una conversación también con el emir de Catar, al que agradeció su "muy importante contribución" a la coalición, y con el primer ministro turco, Recep Tayipp Erdogan.

Desde el Air Force One, Obama repasó con Cameron y Sarkozy "los progresos sustanciales que se han hecho para detener el avance de las fuerzas de Gadafi, en Bengasi y el establecimiento de una zona de exclusión aérea" en Libia, ha indicado Rhodes. Los tres han acordado que "la OTAN debería desempeñar un papel clave en la estructura de mando en el futuro". Según Rhodes, la coalición incluirá países que no forman parte de la OTAN, por lo que la Alianza será "parte de una estructura de mando que se internacionalizará cuando EEUU transfiera" el control. Posteriormente, Obama ha vuelto a manifestar su confianza en que en los próximos días su país podrá transferir el mando de las operaciones militares a otros miembros de la coalición.

A lo largo de las últimas horas, las disensiones entre los aliados acerca del mando y los objetivos de la operación habían hecho saltar las alarmas. Reino Unido se mostraba favorable a que la Alianza Atlántica asumiese el mando, mientras que Francia no veía con buenos ojos esta posibilidad. Su ministro de Exteriores, Alain Juppé, planteaba esta tarde la opción de una "estrutura política" al frente de la operación integrada por los ministros de Exteriores de los países participantes. Juppé explicaba ante la Asamblea Nacional en París que la iniciativa, que se concretaría con reuniones de los estados participantes y la Liga Árabe, había partido de Sarkozy.

Las palabras de Juppé se conocían después de que, en Bruselas, la OTAN cerrara su planificación técnica para ayudar a imponer la zona de exclusión aérea sobre Libia aprobada por Naciones Unidas, pero sin alcanzar un acuerdo sobre si va a participar en esa operación. El ministro recalcaba que la operación la llevan a cabo estados que no son todos miembros de la OTAN, y "por lo tanto no es una operación de la OTAN". Además, insistía en que la intervención será "breve" y "no habrá intervención en tierra" porque la resolución 1973 del Consejo de Seguridad de la ONU que abrió la vía a la creación de una zona de exclusión aérea sobre ese país no lo autoriza.

Las disensiones parecen haber acabado con la paciencia de la canciller alemana, Angela Merkel, que ha decidido que su país se retire las operaciones de la OTAN en el Mediterráneo.

Recrudecimiento de los combates

Después de tres días de ataques, la intervención aliada está fracasando en su objetivo porque no ha logrado detener las bombas de las fuerzas de Gadafi. Por el contrario, las tropas del coronel han recrudecido sus combates contra los rebeldes en varias ciudades del este y el oeste. La ciudad de Misrata, a 210 kilómetros de Trípoli, ha sido objeto de intensos bombardeos. Un portavoz militar de Gadafi aseguró esta tarde que Misrata se encontraba ya bajo su control, lo que fue desmentido por los sublevados.

En Ajdabiya, a 160 kilómetros al sur de Bengasi, se han recrudecido también los intensos enfrentamientos entre las tropas de Gadafi y los combatientes rebeldes. La cadena Al Jazeera ha mostrado imágenes de negras columnas de humo elevándose en la parte oriental de la ciudad. Según el correspondal de la emisora, las tropas de Gadafi han utilizado lanzamisiles y tanques para bombardear la localidad. Ajdabiya es una enclave estratégico para el control de la zona este del país ya que conecta por una carretera con Bengasi y por otra con Tobruk, cerca de la frontera con Egipto. La ciudad de Zintan, en el oeste del país, ha sufrido igualmente intensos ataques por parte de las fuerzas del régimen y al menos diez personas han muerto, según el órgano de dirección de los rebeldes. El éxodo continúa aunque a menor ritmo.

En este contexto, las baterías antiaéreas vuelven a escucharse esta noche en Trípoli, la cuarta desde que comenzaron los ataques de la coalición internacional. Esporádicos trazos rojos surcaban el cielo procedentes de las defensas antiaéreas de Gadafi. El coronel se ha dirigido a la multitud para llamar a la lucha y mostrarse confiado en el triunfo de su régimen frente a la ofensiva militar internacional. "Lograremos la victoria al final", ha dicho.

Mientras tanto, hoy se ha sabido que un avión de combate F-15E de la Fuerza Aérea estadounidense se estrelló durante la tercera noche de operaciones aliadas en Libia, según ha explicado un portavoz del Mando militar para Africa (AFRICOM). Los dos pilotos han podido ser rescatados El accidente ha estado probablemente provocado por un fallo mecánico y no por fuego hostil, según ha indicado el portavoz, Vince Crawley.

Pruebas contra Gadafi

Desde La Haya, el fiscal de la Corte Penal Internacional (CPI), Luis Moreno Ocampo, ha señalado que hay siete casos de manifestantes que fueron tiroteados en la rebelión libia y que pueden constituir crímenes contra la humanidad. En unas declaraciones a Radio 4 de la cadena británica BBC, Moreno Ocampo ha explicado que se está tratando de reunir las pruebas de esta situación y espera informar el próximo 4 de mayo al Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas sobre su investigación acerca de la situación libia antes de entregar el caso a los jueces de la corte.

El fiscal argentino está investigando presuntos crímenes de guerra y lesa humanidad en Libia después de que el Consejo de Seguridad de la ONU le refiriese el caso a finales de febrero. "Estamos reuniendo pruebas, centrándonos en los primeros 12 días (de la rebelión), que es una situación clara pues había civiles desarmados en manifestaciones. Estamos confirmando que fueron tiroteados", agregaba. "El asunto para nosotros ahora es establecer quién les disparó y quién ordenó los disparos", insistió el fiscal. "Estamos identificando al menos siete incidentes que pueden constituir crímenes contra la humanidad y tratamos de obtener pruebas de ello y quién tomó las decisiones y quién hizo los disparos", ha puntualizado Moreno Ocampo.

También ha añadido que será competencia de los jueces establecer si estos incidentes han sido ataques sistemáticos y extendidos y, por tanto, crímenes contra la humanidad en virtud del derecho internacional. "Vamos a ver qué hace (el líder libio, Muamar al) Gadafi, pero no estoy seguro si él será la persona acusada. No puedo decirle esto ahora. El próximo desafío después de enviar el caso será cómo arrestar a la persona", resaltaba Moreno Ocampo. Basándose en pesquisas preliminares, el fiscal ya ha citado como presuntos sospechosos de crímenes contra la humanidad, además de a Gadafi, a varios de sus hijos y otros altos cargos del régimen en Libia.

En España, el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, ha defendido la "legalidad" y la "legitimidad" de la intervención militar en Libia, que, ha dicho, se basa en "un principio humanitario" y no busca expulsar al coronel Gadafi del país, sino "poner fin al genocidio contra su pueblo". Con estos argumentos, Zapatero ha obtenido el aval del pleno del Congreso para que los militares españoles participen un mes en el control de la zona de exclusión aérea y tres meses en el embargo de armas.