Una centenar de españoles regresan en el avión del Gobierno

Un total de 126 españoles han partido del aeropuerto de Tokio pocos minutos después de las 21.00 horas (13.00 horas en España) en el avión chárter contratado por el Gobierno con destino a España, y cuya llegada está prevista para mañana lunes a las 14.30 horas a la base de Torrejón de Ardoz.

En el aparato que ha despegado de la capital nipona viajan 157 pasajeros, de las que una treintena son ciudadanos de otros países, fundamentalmente de la Unión Europea, y también de nacionalidad brasileña. La mayor parte del pasaje está integrada por españoles residentes en Japón y sus cónyuges japoneses. Viajan también 36 niños, incluidos varios bebés.

De estos 157 pasajeros, cinco terminarán su viaje en Bangkok, donde el avión aterrizará para realizar una escala técnica. De esta forma, al aeropuerto de Torrejón desembarcarán un total de 152 pasajeros. El avión contratado por el Gobierno de España para trasladar a los españoles es un Boing 747 con 450 plazas, con lo que más de la mitad de las plazas se han quedado finalmente sin cubrir.

Los 152 viajeros que aterrizarán en España este lunes podrán someterse voluntariamente al dispositivo para el control radiológico que ha puesto en marcha el Consejo de Seguridad Nuclear (CSN). El grupo de seguimiento de la crisis en Japón ha celebrado esta mañana su quinta reunión de trabajo en las instalaciones de la base aérea madrileña para supervisar el dispositivo de atención sanitaria y logística que se ofrecerá a los pasajeros.

El CSN ha explicado que se desplegará un equipo de inspectores y de su unidad de apoyo, que actuarán equipados con instrumental adecuado, y cuya tarea consistirá en realizar un primer chequeo radiológico a los pasajeros y tripulación. Además, estos profesionales examinarán los equipajes y analizarán varias zonas del avión, como la cabina, la bodega de carga o la superficie exterior. En caso de que se detectara algún tipo de radiación en alguna de las personas analizadas, se le realizaría en primer lugar una descontaminación exterior en los casos que proceda. A continuación, en colaboración con las autoridades sanitarias, se procedería a realizar una revisión en un contador de radiactividad corporal para medir la posible contaminación interna.

El Gobierno ha informado de que según los últimos datos recabados por la Embajada en Tokio, el resto de la colonia española que ha decidido permanecer en Japón se encuentra bien.