juicio contra el fundador de wikileaks

La defensa de Julian Assange alude a los «intereses ocultos» que hay tras el proceso

El abogado sueco del australiano asegura que nunca se ha topado con un caso tan "débil" y agrega que las pruebas apenas se sostienen

LONDRES Actualizado: Guardar
Enviar noticia por correo electrónico

El abogado sueco de Julian Assange, Bjorn Hurtig, ha señalado que las dos mujeres que denunciaron en Suecia al fundador de Wikileaks por delitos sexuales pueden tener "intereses ocultos" para inculpar a su cliente.

Hurtig ha hecho esta valoración al prestar testimonio ante el tribunal londinense de Woolwich en la segunda vista del proceso de extradición del experto informático australiano a Suecia, país que le reclama para interrogarle por cuatro cargos de agresión sexual supuestamente cometidos contra esas dos mujeres suecas el pasado agosto, de los que aún no ha sido formalmente acusado. Pese a que el proceso debía quedar hoy listo para sentencia, el juez Howard Riddle ha decidido convocar otra audiencia el próximo viernes para acabar de escuchar a los testigos.

En una declaración escrita previa a su comparecencia, Hurtig ha asegurado que nunca en su carrera profesional se había topado con un caso tan "débil" como el presentado contra Assange y ha agregado que las pruebas que había podido ver, pero de las que no se le había permitido sacar copia, apenas se sostienen. Ha indicado que los mensajes de Twitter y en un blog de las denunciantes, incluidos entre esas pruebas, llevaban a pensar que éstas tenían "intereses ocultos" a la hora de hacer sus acusaciones, ya que hablaban de "venganza" y de "conseguir dinero". El letrado ha apuntado que, tras conversaciones con el Tribunal de Apelación de Suecia, uno de los delitos que pesan sobre Assange se modificó de "violación" a "violación en menor grado".

Por otra parte, Hurtig ha dicho que era "indignante" que la fiscalía sueca hubiera revelado públicamente al principio que Assange, de 39 años, era investigado por violación y ha condenado las filtraciones sobre el caso a la prensa, que han desembocado en un juicio paralelo al fundador del portal Wikileaks.

Controversia por la orden de arresto

Hoy ha declarado además otro testigo de la defensa, el antiguo fiscal sueco Sven-Erik Alhem, quien ha resaltado que era "peculiar" que la fiscalía de Suecia no hubiera interrogado a Assange antes de emitir una orden europea de arresto. La representante de las autoridades suecas, Clare Montgomery, ha contastado en ese sentido que el sospechoso pudo haber dejado Suecia el mismo día en que la fiscal Marianne Ny emitió una orden interna para interrogarle. Hurtig ha puntualizado, a su vez, que no había informado a su cliente de que las autoridades suecas querían interrogarle hasta el 29 de septiembre. En cualquier caso, Montgomery ha admitido que no había "restricciones formales" que impidieran al australiano salir del país. En un comunicado leído en la sala, Ny ha resaltado que, aunque siguió negociando para que el sospechoso volviera voluntariamente a Suecia, dado su perfil consideró que "no era exagerado" emitir una orden de arresto internacional.

Al dar su versión de los hechos, Hurtig ha insistido en que el 15 de septiembre la fiscalía sueca había autorizado a su cliente a dejar el país, al confirmar que no estaba sujeto a restricciones. Cuando el abogado preguntó entonces si Assange iba a ser interrogado, le contestaron que no porque el policía que debía hacerlo estaba enfermo. "Tras nuestra conversación del 15, telefoneé a Julian y le dije que era libre de abandonar Suecia para continuar su trabajo", ha declarado Hurtig, quien ha recordado que su defendido estaba recibiendo amenazas de muerte.

El principal abogado británico de la defensa, Geoffrey Robertson, argumentó el lunes que Assange no debía ser extraditado a Suecia porque no había garantías de que allí fuera a recibir un juicio justo y corría el riesgo de acabar siendo entregado a Estados Unidos, donde podía ser ejecutado por delitos de espionaje. Preguntado sobre esta cuestión, el ex fiscal sueco Sven-Erik Alhem opinó que no era posible en principio la entrega a otro país, pero admitió que "podía haber excepciones" que desconocía y sobre las que no podía pronunciarse.

Al término de la vista de hoy, Mark Stephens, del equipo legal de Assange, ha retado a la fiscal Marianne Ny a que acuda a Londres el viernes para fundamentar su caso. Assange ha subrayado que el fiscal inicialmente encargado de su acusación había sido sustituido por Ny a petición de un político sueco y se ha quejado de que ahora ésta ni siquiera haya asistido al juicio.