Callejón asalta el Pizjuán

Llegó el Espanyol al Ramón Sánchez-Pizjuán con la intención de sacar un punto y se marchó con la sorpresa de los tres. Pochettino dispuso un esquema basado en la defensa acérrima mientras surgía la diosa Fortuna. Y vaya si lo hizo. A pesar de un inicio aplastante de los sevillistas, quienes tuvieron hasta cuatro ocasiones claras para adelantarse, fueron los catalanes los que golpearon primero. Fue Callejón, tras romper de manera sutil el fuera de juego de una insulsa zaga nervionense, el que sorprendió a Varas al filo del descanso.

Ni la ocasión previa de Jesús Navas, ni tampoco las dos intervenciones de Kameni a sendos disparos de Luis Fabiano dejaron un sabor dulce a los hispalenses. El gol sentó como un jarro de agua fría y eso se notó en la reanudación. Con un juego mucho más espeso, Chica y Dídac supieron cortarle el paso en todo momento a Navas y Perotti, desaparecidos.

Cuando la defensa españolista fallaba, entonces estaba ahí Kameni para solucionarlo todo. Hasta cinco paradas de mérito hizo el africano ante el nerviosismo de la delantera local. De nuevo, cuando más lo merecía el Sevilla, llegó el segundo gol blanquiazul. De nuevo Callejón y otra vez aprovechando la dejadez de la defensa sevillana, de las peores de últimos años.

Con el 2-0 todo quedó para sentencia a falta de poco más de un cuarto de hora. El Sevilla quería pero no podía. El tanto en el descuento de Negredo desde fuera del área sólo valió para crear falsas esperanzas. El Espanyol encontraba un tesoro de tres puntos, cuando buscaba una joya de uno solo. Con el pitido final los de Nervión veían como sus esperanzas de ‘Champions’ se desvanecían, mientras los catalanes siguen más cerca de estar en Europa el año que viene.