Los 'camisas rojas' se niegan a retirarse mientras el primer ministro no fije la fecha para la disolución del Parlamento

Los 'camisas rojas', los manifestantes opositores partidarios del ex primer ministro Thaksin Shinawatra, se han negado a abandonar su campamento en el centro de Bangkok y poner fin a sus dos meses de protesta hasta que el primer ministro del país, Abhisit Vejjajiva, no fije una fecha para la disolución del Parlamento.

Los manifestantes, que reclamaban la celebración de elecciones inmediatas, han accedido a entrar en el proceso de reconciliación propuesto por Abhisit para poner fin a la crisis pero rechazan que las elecciones se celebren el 14 de noviembre como propone éste. "Nos quedaremos hasta que Abhisit nos diga la fecha de la disolución", ha afirmado Worawut Vichaidit, uno de los dirigentes del Frente Unido por la Democracia contra la Dictadura (UDD). "El Gobierno debería retirar primero a todas las fuerzas de seguridad. Abhisit no tiene ningún derecho a fijar la fecha de las elecciones, esa es la obligación de la Comisión Electoral. No sabemos cuánto podemos confiar en el Gobierno", ha añadido.

Sirichok Sopha, diputado del Partido Democráta de Abhisit, ha apuntado que la fecha de disolución del Parlamento no es debatible y ha dicho que el Gobierno tiene que estudiar el mejor momento, dándose margen para aprobar el presupuesto para el próximo año fiscal, que comienza en octubre, por ejemplo. "En cuanto a la ley electoral, que estipula que la disolución de la Cámara debería ocurrir entre 45 y 60 días antes de la fecha de las elecciones, podemos calcular que la disolución debería ser entre el 15 y el 30 de septiembre, algo que el UDD debería ser capaz de calcular por sí mismo", ha manifestado.

Cinco condiciones para la reconciliación

Abhisit ha puesto cinco condiciones para el inicio de un proceso de reconciliación previo a las elecciones. El primero de los cinco puntos de la propuesta establece que "todas las partes implicadas deben unirse para defender la monarquía", una referencia velada a los supuestos intentos de Thaksin de derrocar al rey, Bhumibol Adulyadej.

Abhisit ha propuesto además una "reforma nacional para erradicar la injusticia en las estructuras económica y política" por la que el Gobierno fomentaría el estado del bienestar a través de mejoras en la educación y la sanidad. En tercer lugar, "el Gobierno garantizará que los medios de comunicación funcionen como una herramienta constructiva" y, en cuarto, creará una comisión independiente para investigar las muertes registradas en los enfrentamientos entre las fuerzas de seguridad y los manifestantes del pasado 10 de abril, cuando murieron 25 personas y 800 resultaron heridas después de que el Ejército intentase desalojar por la fuerza a los 'camisas rojas'.

Por último, el quinto punto del plan recoge que el Gobierno "adoptará medidas para estudiar las percepciones de la opinión pública con respecto al sistema político, especialmente tras lo ocurrido en los últimos años, e intentará resolver los problemas que surjan".