Una visión distinta de la Ronda Oeste

En la gestión política del municipio en los últimos años se ha considerado como imprescindible y fundamental el desarrollo de la Ronda Oeste como vía de alivio para el tráfico rodado de la ciudad en dirección a la zona costera. Más relevancia aún se le ha dado una vez que se ha puesto en marcha las obras del tranvía.

Paralelamente, en este tiempo se ha ido fraguando una posición alternativa entre la ciudadanía, hasta el punto de formar la plataforma Salvar la Marisma de Carboneros, un enclave natural por el que cruza el proyecto de la carretera denominada Ronda Oeste.

Luis Pardo, el portavoz del colectivo en el que también participa activamente la Asociación Medioambiental Toniza, comenzó a impulsar el rechazo a este proyecto hace unos diez años a través de alegaciones que, asegura, nunca han sido contestadas, a distintos Planes Generales. «El hecho de que ningún PGOU llegara a consolidarse y que la falta de recursos en los últimos años indican que por el momento no se va a ejecutar nos dejó en una posición más relajada», explica el artífice del colectivo.

Daños al entorno

Sin embargo, el actual contexto de redacción del nuevo Plan General les ha vuelto a mover para «intentar que el proyecto no aparezca en el documento y así evitar que se llegue a realizar en algún momento».

La plataforma se inició en octubre de 2011 y desde entonces han logrado reunir unas 500 firmas entorno a un manifiesto en rechazo de la carretera. «Nosotros no somos técnicos pero pedimos que se respete la zona», apunta Pardo. «En el momento en que aparezca la Ronda Oeste, habrá dificultades para acceder y supondrá un destrozo para la zona y las más de 70 especies que allí habitan, sobre todo por la contaminación ambiental y paisajística que generaría una carretera de cuatro carriles». También desde el colectivo cuestionan la utilidad de la Ronda Oeste para aliviar el tráfico «si después enlaza con la carretera de La Barrosa, que sólo tiene dos carriles».

Para dar a conocer la problemática y concienciar a la ciudadanía, Toniza, a través de la plataforma, organizó en enero una salida al sendero de las marismas de Carboneros. A la actividad asistieron unas 110 personas.

Alegaciones y contactos

Además de planificar emprender una serie de alegaciones contra el proyecto una vez se apruebe inicialmente el PGOU (al igual que ya hicieron en el trámite de las Normas Sustantivas), el colectivo en los últimos meses ha mantenido una serie de contactos políticos para tratar de incidir de forma más directa en el tema. De esta forma, han tratado el tema con Izquierda Unida y la propia delegada de Urbanismo, Marisol Ayala, «que se quitó toda responsabilidad sobre el proyecto argumentando que es un tema de la Junta de Andalucía», comentó Luis Pardo. También esperan mantener citas con la Demarcación General de Costas y el Parque Natural Bahía de Cádiz para plantear su posicionamiento al respecto.

Sobre el asunto, Ayala aclaró que la Ronda Oeste es un proyecto «aprobado por la Junta de Andalucía, existe y por tanto debe aparecer en el PGOU» y consideró «una barbaridad» la alternativa propuesta por la plataforma ya que, según explicó, supone ensanchar la carretera de Las Lagunas de 17 a 32 metros, con «las consecuencias que tendría para todas las viviendas que allí existen y tendrían que ser retranqueadas». Y es que la plataforma Salvar la Marisa de Carboneros aporta una propuesta para evitar la ejecución de la Ronda Oeste, el ensanche de la carretera de Las Lagunas «y buscar por ahí la salida natural del tráfico hacia la autovía de Cádiz-Vejer mediante un paso elevado, que además sería más barato», indica Pardo.

En cuanto al encuentro con Izquierda Unida, el concejal Roberto Palmero comenta que tras atender al colectivo «plantearemos esta postura en la próxima asamblea para posicionarnos al respecto». No obstante, incide en que la Ronda Oeste es un proyecto «lejano y difícil de ejecutar».