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La tapadera

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La investigación que ha llevado a cabo el Juzgado número 4 de Cádiz y los agentes de la Unidad de Blanqueo de Capitales (UDYCO) de Sevilla sobre el fraude de las ayudas a la reindustrialización de la Bahía ha puesto de manifiesto que, detrás de este desvío de dinero, había una trama organizada para su lavado en paraísos fiscales. El relato de los hechos es muy similar al argumento de la película protagonizada por Tom Cruise, ‘La Tapadera’, donde un poderoso despacho de abogados de Memphis se encargaba de blanquear ingentes cantidades de dinero procedente de la mafia. Las sospechas del pufo se convierten en realidad cuando el intrépido y joven letrado se da cuenta de que la contabilidad no encaja y se hacen falsos malabarismos financieros para cuadrar los números de cara a Hacienda. El despacho en cuestión era la tapadera de una potente red en la que estaban implicados empresarios, mafiosos, políticos y lo mejor de cada casa. La jueza que lleva el caso del Plan Bahía ha imputado a 31 personas por la desaparición entre 2008 y 2011 de 21 millones de euros de ayudas públicas que tenían como destino la captación de inversiones para la maltrecha Bahía gaditana.

Este dinero lo aportaba el Ministerio de Industria y lo gestionaba la Agencia IDEA, de la Junta, con las bendiciones de la Diputación de Cádiz, encargada de evaluar y autorizar los expedientes que solicitaban la subvención. Entre los imputados se encuentra el que fue gerente de la oficina del Plan Bahía, el socialista Antonio Perales, la responsable de Empleo en Diputación durante la etapa de gobierno de Francisco González Cabaña, la exconcejal socialista de Sanlúcar, María José Valencia, y la actual delegada provincial de la Agencia IDEA, Rosa Mellado, que cantó la ‘Traviata’ ante la juez cuando la citó a declarar por las presuntas irregularidades detectadas.Mellado heredó una situación anómala y, desde luego, no ha tenido ningún tipo de escrúpulo a la hora de poner blanco sobre negro a las preguntas que le hizo la juez sobre el ‘modus operandi’ que seguía el Ministerio y la Diputación para conceder las ayudas. Sin embargo, la red que ha destapado la jueza tiene un muñidor; alguien que desde más arriba movía los hilos o, al menos, este es el argumento que defiende el PP. Una X política.

El diputado europeo del PSOE Juan Fernando López Aguilar participó esta semana en un debate televisivo el mismo día en que el extesorero del PP, Luis Bárcenas, ingresaba en prisión. López Aguilar fue muy claro en sus posiciones y puso en duda el hecho de que nadie de la sede del PP, en Génova, supiera nada de las hazañas de este personaje. Amasar una fortuna de 40 millones de euros y depositarla en un banco de Suiza no es un trabajo de horas, ni de días, sino de años. ¿Nadie en el PP sabía a qué se dedicaba este senador de gomina y traje a medida? Es el mismo argumento que ahora tratan de airear los populares gaditanos con el fraude de las ayudas a la reindustrialización. ¿Nadie en la Junta sabía nada del desvío de estos fondos en Cádiz? ¿Ningún responsable político de la Diputación conocía el pastel? A lo mejor el pastel lo cortaba algún destacado político.