acusado de estafa

«Me obligan a venir a la fuerza como si fuera un reo de mala muerte»

Ruiz-Mateos acude al juzgado de Palma que le advirtió de su detención; «No me arrepiento de nada, me siento feliz y orgulloso de haber trabajado para la clase obrera», asegura

Palma de Mallorca Actualizado: Guardar
Enviar noticia por correo electrónico

El empresario José María Ruiz-Mateos ha acudido hoy a los juzgados de Palma en los que estaba citado a declarar por sendas estafas por la venta de dos hoteles, en uno de los cuales la jueza le había advertido de que ordenaría su detención si no comparecía en su tercera citación.

Ruiz-Mateos ha llegado con retraso a los juzgados de Palma debido a un problema en el vuelo que lo trasladaba a la capital balear, lo que fue comunicado al juzgado, según fuentes jurídicas.

El empresario ha llegado a las 10:09 horas a la sede judicial acompañado de su abogado y uno de sus hijos.

Ruiz-Mateos estaba citado a las 9:30 horas en el juzgado de instrucción número 3 de Palma por una demanda sobre una supuesta estafa en la venta de un hotel de Mallorca.

Después, por otros hechos parecidos, debe comparecer en el juzgado de instrucción número 9, cuyo titular dictó el pasado día 12 medidas cautelares contra los seis hijos varones del empresario, a quienes prohibió su salida de España tras prestar declaración.

A su llegada a los tribunales, Ruiz-Mateos ha dicho a los periodistas que las causas en las que tiene que declarar están provocadas "por un banquero" y que piensa "ser explícito y hablar muy claro".

"No me arrepiento de nada, me siento feliz y orgulloso de haber trabajado para la clase obrera", ha dicho el empresario.

Preguntado sobre su estado de salud, ha dicho encontrarse "maravillosamente bien".

"El buen humor no me lo han estropeado, pero me obligan a venir a la fuerza como si fuera un reo de mala muerte", ha añadido.

Querella de Francisco Miralles

El juzgado de instrucción número 3 de Palma investiga la querella del empresario Francisco Miralles por una supuesta estafa de casi 14 millones de euros en la venta del hotel Eurocalas, situado en Calas de Mallorca.

Miralles vendió en 2006 a una empresa de Zoilo Pazos, sobrino de Ruiz-Mateos , el hotel Eurocalas por 24 millones de euros mediante un contrato en el que el empresario y sus hijos varones actuaron como avalistas.

Miralles asegura que los Ruiz-Mateos le deben 13.931.087 euros, más los intereses de demora, por el establecimiento turístico, sobre el que además pesa una hipoteca de 19 millones de euros.

Varios de sus hijos, así como su sobrino, declararon en su día ante este juzgado palmesano y atribuyeron al patriarca de la familia la decisión de comprar el hotel y las posteriores gestiones en torno a él.

En el juzgado de instrucción 9 Ruiz-Mateos deberá responder por otra querella relativa a la venta de otro hotel por parte de la familia Radó.

En esta causa se investiga la venta a plazos de un hotel por un procedimiento similar al anterior caso, ya que sobre él los empresarios también constituyeron luego una hipoteca y, posteriormente, dejaron de pagar el dinero de la compra.

Tras su declaración el pasado día 12, el juez Enrique Morell decretó la prohibición de salir de España para los seis hijos varones del empresario y también la obligación de que comparezcan cada quince días en sede judicial.