Las rebajas de la esperanza en el comercio jerezano

Las colas de vehículos colapsaron los accesos a Luz Shopping o Área Sur. Mientras tanto, el comercio tradicional vivía un sábado con animación aunque sin cifras comparables a esas grandes superficies. Hasta ahí, todo era ayer como en los días de apertura de las tiendas durante las fiestas que han quedado atrás. Pero existía una diferencia sustancial: se trataba del primer día de las rebajas de invierno de este año. Las mejores de la crisis, según las previsiones.

Las expectativas de ciertos colectivos como la Unión de Consumidores de Cádiz que señalaban en Jerez, como en el resto de la provincia, una previsión de gasto por cada persona doce euros mayor que hace un año ha debido convivir, sin embargo, con el punto de excepticismo que, a pie de calle, desvelaban ayer mismo algunas personas en el centro de la ciudad. «Estaba esperando las rebajas, pero veo que tampoco es para tanto», decía por ejemplo Paqui Ríos, que pese a todo ya llevaba en ese momento un par de bolsas en sus manos.

Unas botas y un abrigo –«que es lo que se supone que más merece la pena en rebajas», dice esta joven– son, junto a unas camisetas, el resultado de su compra de inicios de cuesta de enero. «No soy de las que se guarde de gastar en Reyes para reservarlo para las rebajas», añade apreciando que «la gente parece que está un poquito más parada que el año pasado». «Me voy a gastar exactamente lo mismo que en 2011», decía por su parte Carmen Chica ante un montón de zapatos. «No necesito nada más, gracias a Dios», añade esta otra señora.

Manuel Macías y Paula Blanca también andaban buscando zapatos a mediodía de ayer. Sus bolsas portaban ya en ese momento unos pantalones y algunas camisetas que encontraron de oferta. Él aseguraba que no pasará este año de los 50 euros de gasto en estas compras, «menos que el pasado» según asegura convencido, mientras que ella cifra en unos 60 euros su despliegue en estas fechas, «igual que el año pasado». Con todo, no siempre las intenciones de prudencia con las que, de partida, se acude a los comercios se cumplen finalmente.

Hasta el próximo 3 de marzo se despliegan estas oportunidades que se cuelgan en los escaparates con rebajas del 50, 60 o 70%, los más generalmente observados en un recorrido por los establecimientos de calles como Larga, Lancería o Doña Blanca. Pero, aunque restan días para confirmar si finalmente podrán recibir la consideración de primeras con repunte en el gasto tras el inicio de la crisis que arrastramos desde 2007, lo cierto es que el centro no acusaba ayer la espectacular presencia que solía caracterizar estos estrenos antes de ese año.

Los Reyes han traído dinero

Fernando García, el presidente de la asociación de comerciantes de Acoje, ofrecía, sin embargo, una primera impresión ligeramente distinta: «Hay mucha gente en el centro y se ve que las rebajas van a ser un poquito más positivas que el año anterior, hay muchas personas con bolsas en sus manos lo que quiere decir que están encontrando muchos regalos económicos», apunta con unas esperanzas que, desgraciadamente, están emparentadas con los malos resultados de la campaña de las fiestas que acaban de concluir.

«Las previsiones de la Navidad no se han cumplido», afirma rotundamente a la espera de que una encuesta entre los asociados proporcione cifras a ese balance que esperan poder presentar esta próxima semana. «Pero somos conscientes de que ha sido una Navidad flojita, que el consumo ha bajado muchísimo porque la cosa ha estado mucho más cortita y que se han producido en Reyes muchos regalos monetarios que, en cierto modo, nos van a beneficiar ahora de cara a las rebajas», augura Fernando García esperanzado.

El presidente de Acoje se suma, por tanto, a las previsiones de repunte anotado desde la Unión de Consumidores y «si el año pasado nos quedamos en un 7% de incremento, a ver si este año alcanzamos estos otros del 10% o el 12%», señala observando indicios que apoyan esa expectativa: «Hacía tiempo que no se veía por las mañanas, a las nueve y media al abrir, a gente esperando en la puerta del negocio; por eso esperamos que el consumo sea mejor en rebajas que en Navidad», explica con satisfacción evidente.

A pesar de las dificultades de la anterior campaña y la necesidad de una buena de rebajas, las tiendas no podrán abrir hoy, que sería el segundo día de rebajas, porque la ley obliga a respetar este domingo de descanso, una cuestión que obvia durante los descuentos de verano. Los comerciantes ya han solicitado que se modifique este aspecto que a su juicio «no tiene ningún sentido».

Y en lo que respecta al derecho del usuario durante las rebajas, la Junta comenzó ayer su campaña de inspección en la que se comprobará que hay claridad en la información en el etiquetado, con el precio anterior y el rebajado y que la calidad sea la misma que durante el resto de la temporada. Los establecimientos tienen la obligación de mantener el mismo criterio para las formas de pago y las devoluciones.