La organizadora de las fiestas de Berlusconi sí declarará

El eslabón más débil de la cadena de presuntos cómplices en torno a las fiestas de Silvio Berlusconi es Nicole Minetti. Emilio Fede, de 79 años, y Lele Mora, de 55, los otros dos acusados de favorecimiento de la prostitución en el 'caso Ruby' por llevar chicas a las fiestas del magnate, son viejos amigos suyos y curtidos en afrontar asuntos sucios. Pero Minetti, de solo 25 años y una ambición que la ha llevado de ser azafata televisiva a sentarse en el consejo regional de Lombardía, se ha visto metida de lleno en el escándalo. Es la que aparece más implicada en la organización de las veladas, la persona de referencia de las chicas, y está en infinidad de escuchas. Fue quien Berlusconi envió a una comisaría de Milán a sacar a 'Ruby', la joven marroquí que centra el escándalo, cuando fue detenida por robo. Está llamada a declarar el martes ante los fiscales y ayer, por sorpresa, anunció que se presentará. Este gesto rompe la línea de defensa del mandatario, acusado de prostitución de menores y abuso de poder, que se ha negado a acudir por no reconocer la legitimidad del tribunal.

Quizá Minetti se limite a ejercer su derecho a no responder, pero el hecho de aceptar la convocatoria es una novedad, pues todos los subordinados del primer ministro se han movido con una estrategia común marcada por sus abogados. Sin embargo, el 15 de enero, al día siguiente de estallar la última y más grave fase del escándalo, 'Il Cavaliere' llamó a todas las chicas de las fiestas a su mansión de Arcore para instruirlas sobre cómo actuar. Minetti no fue. Según revelan las escuchas, estaba ya distanciada del primer ministro y a una amiga le confió que se movería con su abogado. Estos días resiste mal la presión y llega al borde de las lágrimas en las entrevistas. Su cita del martes en los tribunales despierta mucho interés, por lo que pueda decir. La polémica llamada de Berlusconi a un debate televisivo, con una apasionada defensa de Minetti, se podría interpretar como una maniobra de emergencia.

Juicio «muy pronto»

La Fiscalía adelantó ayer que la petición de procesamiento de Berlusconi, que abrirá el juicio si el magistrado la secunda, llegará «muy pronto». El primer ministro soltó un nuevo vídeo ayer, el tercero. Volvió a repetir que no tiene «ningún miedo» de ser juzgado: «Teniendo la conciencia totalmente tranquila, lo haré apenas se restablezca una situación de corrección judicial». Se refiere a su tesis de que el tribunal de Milán es incompetente para juzgarle, por razones geográficas y de legitimidad. Sostiene que, como jefe de Gobierno, debería procesarle el tribunal de ministros. Pero no aclaró qué pasará si no le dan la razón. «Seguiré adelante», concluyó.

Mientras, aumentan las convocatorias de manifestaciones contra el magnate. Ayer corrió el rumor de que él mismo va a organizar una el día 13 en Milán contra la judicatura, pero luego se dejó en «mera hipótesis».