«Hemos logrado recaudar 33.000 millones en la lucha contra el fraude»

El Gobierno puso en marcha en 2005 un gran plan para perseguir el fraude fiscal, centrado en el control de las actividades que más se prestan a la evasión de impuestos. El secretario de Estado de Hacienda, Carlos Ocaña, desvela los últimos datos de recaudación ligados a esas actuaciones y asegura que todos los grandes casos de corrupción destapados recientemente tienen su origen en investigaciones iniciadas por la Agencia Tributaria.

-¿Cuál es el resultado del plan contra el fraude impulsado en 2005?

-Estamos muy satisfechos con los resultados. Los últimos datos que tengo sitúan la recaudación total en más de 33.000 millones de euros por actuaciones de control. Hemos intentado incidir en lo que nos parecían las principales bolsas de fraude: determinadas formas de defraudación profesional, las declaraciones de las empresas con actividad en el extranjero -con frecuencia se observan actuaciones consistentes en imputar a empresas situadas en España gastos que no se producen-, el comercio exterior con países de fuera de la OCDE y el IVA.

-¿La crisis ha hecho crecer la evasión de impuestos?

-En una situación económica difícil algunos contribuyentes concretos pueden tener mayor propensión a defraudar, pero no necesariamente hay más fraude. La crisis se refleja más en otro tipo de comportamientos. Por ejemplo, a la hora de pagar el IVA los contribuyentes piden aplazamientos con mucha más frecuencia. Entre enero y octubre el número de solicitudes ha aumentado un 54,9% interanual, pasando de 266.048 en 2008 a 412.021. Y su importe ha crecido el 100%, de 3.727 millones el año pasado a 7.446 millones en 2009.

-¿Cuántos de los últimos grandes casos de corrupción destapados tienen origen en actuaciones de la Agencia Tributaria?

- Todos los sonados, la 'operación Malaya' en Marbella, los casos Palau de la Música Catalana y Pretoria. En el origen está Hacienda investigando un incumplimiento fiscal. A partir de ahí se tira del hilo y se descubren tramas mayores.

-¿Se está poniendo fin a un período en que la sensación de impunidad ante el fraude era mayor?

-España ha cambiado mucho en los últimos años, ya no es aquel país en el que alguna famosa se declaraba sorprendida por tener que pagar impuestos. La inmensa mayoría cumplen sus obligaciones, aunque persistan bolsas de fraude.

-¿Hay más vigilancia sobre el sector inmobiliario?

-Hemos incrementado la presión desde 2005, porque nos parecía un sector en el que había más bolsas de fraude que investigar. Hoy seguramente habrá caído, pues con la crisis hay menos actividad. Algunos de los casos descubiertos tienen que ver con cosas que ocurrieron en el boom inmobiliario.

-La economía española cerrará 2009 con un déficit en torno al 10% del PIB. ¿Cuál es su plan para reducirlo hasta situarlo en 2013 por debajo del 3% que exige la UE?

-Vamos a atacar el problema por dos vías: mediante la austeridad, reduciendo gastos y retirando algunos de los impulsos fiscales, y mejorando los ingresos mediante la subida de impuestos. A más largo plazo será necesario el compromiso de todas las administraciones para controlar el gasto.

-El déficit fijado este año para las comunidades autónomas es del 1,5%, pero la experiencia de 2008 -sólo cumplieron siete el objetivo de estabilidad- hace sospechar que algunas infringirán ese mandato. ¿Tomarán medidas?

-Nuestra previsión está basada en el objetivo del 1,5% y queremos que se cumpla. El sistema no contempla sanciones, el instrumento real son las autorizaciones de endeudamiento, y eso sí lo aplicaremos.