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La Fiscalía estudia penas más duras contra los conductores sin carné

El Ministerio Público busca frenar la elevada cifra de detenciones y los casos de reincidentes

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Un conductor es cazado al volante sin carné, y no porque se le haya olvidado en la mesita de noche, sino porque nunca se ha examinado para obtener el permiso. Esta imprudencia grave es considerada desde mayo del año pasado como delito. Esta reforma del Código Penal perseguía concienciar a golpe de condena unos desmanes que hasta la fecha sólo se castigaban con multas. El legislador buscaba concienciar, pero la evolución que ha tenido el número de detenidos a lo largo de 2009, indica que en Cádiz la lección no está aprendida y hasta se podría decir que la ansiada concienciación brilla por su ausencia.

En la Fiscalía no esconden su sorpresa y su delegado en Seguridad Vial, Juan Bosco Anet, reconoce que esperaba una cifra más moderada de ciudadanos detenidos por circular sin permiso, aunque fuera por temor a ser condenados. Pero la realidad es otra: el año pasado fueron llevados a juicio por este motivo 1.690 conductores. Sin embargo, al cierre de octubre y con dos meses por delante aún para concluir la estadística de 2009, ya se han producido 2.007 imputaciones (547 corresponden a casos de la Bahía). Siendo fieles a los números, el dato que se refiere al año anterior sólo comprende desde el mes de mayo, cuando entró en vigor la reforma legal, pero atendiendo incluso a este matiz, la tendencia sigue siendo alcista. «Es cierto que ahora se hacen más controles en carretera y que podría pensarse que ése es el motivo del número tan elevado de conductores sin carné. Pero incluso teniendo en cuenta este factor, los datos son preocupantes».

Ante esta situación ha surgido un debate en el seno de la Fiscalía de Cádiz, como está ocurriendo en otras zonas del país, sobre si se debe endurecer las acusaciones que formula el Ministerio Público, sobre todo en el caso de los reincidentes, para atajar esta cifra porque parece que el mensaje disuasorio inicial que pretendía lanzar la entrada en vigor del carné con puntos y el consiguiente endurecimiento de penas no ha calado en muchos gaditanos.

De los más severos

El fiscal delegado de Seguridad Vial asegura que a día de hoy, el criterio que está siguiendo la Fiscalía gaditana ya es uno de los más severos que se están aplicando en el estado español, donde hay fiscales que aún no tienen claro, desde un punto de vista jurídico, si deben solicitar prisión para unos conductores que hasta hace unos pocos meses sólo habían cometido una infracción. La amenaza de la cárcel fue empleada precisamente como método para disuadir por la DGT cuando estaba a punto de entrar en vigor el nuevo delito. La Dirección General se lo advirtió por carta a los 25.000 infractores que fueron denunciados por este motivo en 2007, pero a día de hoy la prisión sólo se impone a un reducido número.

La ley reserva penas de tres a seis meses de cárcel o multa de 12 a 24 meses y trabajos en beneficio de la comunidad de 31 a 90 días por conducir sin carné. Pero dentro de este abanico de sanciones, la Fiscalía aplica criterios más o menos duros en función de las circunstancias del detenido. Según explica el fiscal Juan Bosco Anet, las condenas más habituales que se están imponiendo en Cádiz son sanciones que superan los 1.000 euros. A diferencia de otros delitos, en los que el acusado busca la declaración de insolvencia para no hacer frente al pago, «aquí rara vez no lo hacen ante el temor de perder el coche». La prisión sólo la está pidiendo el fiscal cuando un mismo conductor es arrestado a la tercera vez. Es aquí donde reside el debate que existe en la Fiscalía, si es conveniente pedir la prisión antes para frenar el dato. A día de hoy, una media de tres conductores al mes son condenados a penas de cárcel. «Creo que se está dando una respuesta adecuada, pero no se puede obviar que la tendencia hacia una disminución no se está dando», señala el fiscal delegado.

El año pasado fueron enviados a la cárcel 112 andaluces por conducir sin carné, 20 eran de Cádiz, pese a que se imputaron a más de 1.600.

No sólo preocupa el aumento de detenciones, también el número de reincidentes que constituyen ya un 15% en tan poco tiempo de vigencia de un delito de nuevo cuño. Juan Bosco Anet pone como ejemplo la estadística de octubre. De los 190 conductores sin permiso llevados a juicio, 26 ya habían sido cazados antes. Son ejemplos de infractores que no les asusta la ley ni tampoco destierran malos hábitos al volante.