Alumnos en la clase de la profesora Eva Gómez de la EOI de Cádiz. / VÍCTOR LÓPEZ
Ciudadanos

«El único que hace esfuerzos en este proyecto es el profesor»

La falta de apoyo y de equipamiento son las principales quejas de los educadores que imparten materias en distintas lenguas

CÁDIZ Actualizado: Guardar
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Los cursos para profesores reúne a alumnos de todo tipo. La Escuela de Idiomas de Cádiz tiene hasta seis grupos de CAL que dan clase tres días a la semana. Llegar a la hora puede suponer toda una odisea cuando el trabajo termina a las tres de la tarde y a las cuatro empieza la formación. Todo sin flexibilidad de horarios, ni incentivos económicos. Ésa es la principal queja de los alumnos docentes, que dicen soportar todo el peso del proyecto bilingüe.

Este medio habló con los asistentes a una clase de segundo de CAL en la Escuela Oficial de Idiomas de Cádiz a cuyo frente se encuentra la profesora Eva Gómez. El aula la compone una treintena de profesionales que se ponen al otro lado del pupitre para aprender inglés. «Nos encontramos con alumnos que tienen más formación que nosotros en el idioma y así cuesta mucho dar la clase».

Para que un aula sea bilingüe el profesor debe impartir entre un 30% y un 50% en otra lengua. Durante la lección se alternará el castellano con el otro idioma. El reto es difícil y los profesores piden apoyo por parte de la Administración y una mayor formación. «Llevamos ya dos años, pero no nos vemos preparados para afrontar una clase», reconocen. También lamentan la falta de equipamiento en los centros adaptados. «No contamos con libros de texto adaptados y hay que elaborar apuntes propios y tampoco existen laboratorios de idiomas adecuados en todos los colegios e institutos».

La motivación es fundamental. En el caso de los alumnos de este curso la nivelación es difícil. Distintas edades y distinta formación conviven en el aula. «Son alumnos muy disciplinados y muy trabajadores, pero no siempre les resulta fácil», reconoce la profesora Gómez.

Respecto a los cursos en el extranjero que la Junta pone a disposición de los funcionarios, explican que «son muy pocos los que se ofertan y resultan fundamentales para que la enseñanza sea efectiva», lamentan y solicitan una mejora de la oferta formativa.