«Fue todo muy rápido, tuve fiebre sólo un día»

La gripe A sorprendió a Álvaro Periñán fuera de Cádiz. Estaba en París de viaje de estudios con 50 de sus compañeros del Instituto Drago. No habían llegado a la mitad de las vacaciones cuando uno de ellos comenzó a notar los síntomas. El joven de 17 años recuerda que «cada día iba enfermando más gente», y a él también le tocó.

Durante el aislamiento tuvo fiebre, pero no le duró más allá de un día. «Llegué a 39 y lo que más me extrañó fue que tuve tos, pero al día siguiente todo comenzó a pasar». Ahora se sorprende cuando ve a la gente tan alarmada e insiste en que «es una gripe como otra cualquiera, no entiendo tanto miedo».

Del pasaje gaditano pasaron la gripe 27 estudiantes. Cuando volvieron les aconsejaron continuar con el aislamiento y pasar por el centro de salud, pero pocos hicieron caso. «Yo salí de casa, estaba de vacaciones y no iba a perder los días», reconoce Álvaro, que asegura no haber contagiado a nadie.

Durante la estancia en Francia les hicieron pruebas a tres alumnos y todos dieron positivo para el virus A H1N1. El resto de los pacientes fueron diagnosticados por extensión del contagio.

La gripe se quedó en el hotel parisino y forma ya parte del anecdotario del viaje. «No sabemos de dónde vino el contagio, pero si alguien la tenía era lógico que nos la pasara». Los jóvenes acudían al mismo comedor y utilizaban duchas comunes.

El joven considera ahora que las medidas higiénicas que se están proponiendo son excesivas. Al fin y al cabo, «no se pasa peor que durante una gripe normal o un resfriado». «Creo que son las personas mayores y los que tienen problemas respiratorios los que deberían tener cuidado, el resto, sólo con abrigarse tiene bastante».