El ahorro de las familias se duplica en un año y roza el 8 por ciento de su renta disponible

La crisis se ha convertido en un impulso para el ahorro. Así, durante el primer trimestre de 2009, el índice de reservas de las familias alcanzó el 7,9% de su renta disponible, 4,8 puntos más que en el mismo periodo de 2008. Pero lo cierto es que este comportamiento no tiene una lectura positiva.

La evolución de la hucha obedece a que los hogares consumen menos porque tienen miedo a un futuro que se presenta incierto y un deterioro económico que puede ir en aumento. Además, el fantasma del paro planea sobre gran parte de la población. Los períodos móviles de cuatro trimestres, que permiten apreciar las tendencias, muestran un repunte de 1,1 puntos. La situación demuestra que el ahorro doméstico acapara el 14,1% de la renta disponible.

El comportamiento de las familias figura en un informe del Instituto Nacional de Estadística relacionado con la Contabilidad Trimestral. El estudio cifra la necesidad de financiación de los hogares en 4.062 millones, un 1,5% del Producto Interior Bruto (PIB). Muy superior es la escasez que atraviesan las sociedades no financieras, que requieren un total de 24.985 millones (9,5% del PIB). La capacidad de las administraciones públicas se situó en 261 millones (0,1% del PIB) y la relativa a las instituciones financieras, en 6.343 millones (2,4% del PIB).

Salarios

La renta disponible de los hogares registró una subida interanual del 1,5% hasta alcanzar los 167.642 millones, cifra superior en 2.509 millones a la estimada en el primer trimestre de 2008, cuando la crisis no había hecho nada más que empezar. Al resultado final contribuyó el descenso del saldo en un 2,8% de rentas primarias, en el que destacó la disminución del 7,2% en el excedente de explotación y del 2,7% en la remuneración de los asalariados, compensada por el saldo neto de los ingresos de la propiedad que creció un 26,4%.

Por lo que se refiere a la distribución secundaria, las familias se beneficiaron de un volumen de prestaciones recibidas que creció a una tasa interanual del 16% y también de un saldo de transferencias corrientes que aumentó hasta un 25,2%. Desde el punto de vista de los empleos, el montante de cotizaciones sociales pagadas bajó un 2,8% y los impuestos sobre la renta y el patrimonio, un 6,6%. La consideración conjunta de todos los elementos determinó ese crecimiento interanual del 1.5%.

Como resultado de la actuación de todos los sectores institucionales, la economía nacional presentaba una necesidad de financiación, frente al resto del mundo, de 22.443 millones euros en el primer trimestre del presente ejercicio, 7.907 millones inferior a la estimada para el mismo periodo de 2008. La cifra representaba el 8,5% del PIB, 2,7 puntos menos que 12 meses antes. En el examen de cómo las familias utilizaron su renta disponible es cuando se descubre que el gasto interanual en consumo se redujo un 3,6%. La retracción supuso que el ahorro alcanzara los 13.310 millones, 8.117 millones más que un año antes y que la tasa se elevara al 7,9%.

Créditos al consumo

El crédito al consumo -el dedicado a la adquisición de mobiliario de cocina, pagar viajes o al consumo mediante tarjetas de crédito- alcanzó un volumen de 4.254 millones en el primer trimestre de este año, lo que supone un descenso del 24% respecto al mismo periodo de 2008. Así lo expuso ayer la Asociación Nacional de Establecimientos Financieros de Crédito. La organización destacó que los números no hacen sino reflejar «el delicado momento que atraviesa la economía y el incremento del paro, lo que hace que las familias no vean el futuro con optimismo».