Lagerfeld lleva faja

Karl Lagerfeld, el diseñador alemán de moda amiguísimo de la princesa Carolina de Mónaco, siempre ha tenido fama de rarito. Y para muestra, su propia imagen, tanto hace unos años, cuando destacaba por sus kilos de más, como ahora, que luce hecho un pincel. Él nunca deja nada al azar. Todo está estudiado y así lo revela en un libro Arnaud Maillard, que fue su asistente personal durante 15 años.

Para empezar, las gafas oscuras que siempre lleva el descubridor de Claudia Schiffer no obedecen a sus problemas con el sol. De lo que se trata es de poder echar una discreta cabezadita en las reuniones de trabajo o cuando se aburre. Además, para perfilar su figura y embutirse en tejanos de mujer de la talla 34, el diseñador usa a diario una faja a modo de corsé. El maquillaje es otra de sus preocupaciones, como su cuidada melena, que empolva con champú seco. Y para ocultar las arrugas, nada mejor que las camisas de cuello alto. Y ahí estaba él para diseñarlas.