Coque Malla trae una fría primavera a La Isla

A la una de la tarde daba comienzo en el parque Almirante Laulhé de San Fernando una nueva edición de la Fiesta de la Primavera a la que le costó arrancar debido a la escasa participación de personas. Una afluencia que conforme avanzaba la tarde, y se subían a los escenarios las principales atracciones, mejoró su imagen con la asistencia final de unas 300 personas, sobre todo para asistir al concierto de Coque Malla, el gran atractivo del cartel y que presentaba su nuevo disco La hora de los gigantes.

Un evento que sobrepasó la medianoche y que contó con diversas actividades que amenizaron la jornada y que permitieron que diferente generaciones de jóvenes se encontraran en un mismo lugar. El parque infantil, las degustaciones gratuitas, los puestos y los romanceros completaron un programa caracterizado por distintos estilos musicales pasando por el rock y llegando al flamenco fusión.

Aunque el cielo despejado invitaba a salir a la calle, el fuerte viento de poniente amenazaba con helar la fiesta, sin embargo, la amplia representación de grupos y las ganas de divertirse tanto de isleños como de otras personas que llegaron de variados puntos de la provincia, permitió dar el calor necesario para que el acontecimiento no fuera un fracaso, si bien no consiguió una afluencia destacada de personas, ni siquiera en el concierto de Malla.

Contrareloj fue el grupo encargado de inaugurar el escenario principal, en un momento en el que había pocas personas, ya que a la jornada matutina le costó coger el ambiente. El grupo presentó las canciones que recogen en su nueva maqueta de un estilo pop tradicional. Tras ellos actuaron Las Mónicas encargadas de poner el acento flamenco a la jornada. Unas mujeres que presentaron el espectáculo Va por Ellas en el que rinden homenaje a cantantes y contaoras desde el año 1937 hasta la actualidad. De esta forma, realizaron versiones flamencas con Aires de Cái de temas de Rocío Jurado, Rocío Dúrcal o Alaska.

Mientras tanto, en el otro escenario el hip hop se convertía en el principal protagonista contando con más de un centenar de seguidores. Fue la Batalla de Grillos la encargada de caldear el ambiente a través de una competición en la que participaron más de treinta raperos soltando sus mejores rimas por un premio de 300 euros. Fue Mauro el que finalmente convenció al jurado tras batir en la final del concurso a Profeta, en un duelo que contó con varias réplicas. Un escenario en el que también se realizaron exhibiciones de scratch que cambiaron a ritmos de funky y rock de la mano de Purple Spreend.

Carlinga y la Microband se convirtieron en la antesala de la gran actuación de la noche, el concierto del experimentado músico Coque Malla, que se subía al escenario sobre las diez y media de la noche. Casi sin descanso paso por La hora de los gigantes, ya que antes de la medianoche había acabado. She's my Baby, Cuídate o Hace Tiempo volvieron a reencontrar al madrileño con su público que añoraba el volver a escuchar al líder de Los Ronaldos.

El colofón a la fiesta lo pusieron Mr. Chagar y Charlie Faber que en el escenario hip hop continuaron pinchando discos hasta que al final la Fiesta de la Primavera echó el cierre. Una bienvenida templada.