Chaves advierte de que el ajuste inmobiliario no ha concluido y pronostica un 2009 «duro»

Un ejercicio de equilibrio de máxima dificultad. Manuel Chaves advirtió ayer, durante su comparecencia parlamentaria para informar sobre la situación económica en Andalucía, de que en 2009 viviremos lo peor y el principio del fin de la actual crisis.

A los andaluces, por lo tanto, nos esperan doce meses de infarto. Así se desprende de las palabras del presidente de la Junta que, textualmente, dijo: «Hay que ser realistas, 2009 va a ser un año duro, pues el ajuste inmobiliario no ha finalizado, las tensiones crediticias persisten y la caída de la demanda y el empleo no ha tocado fondo; pero 2009 también es un año crucial, porque debe ser aquel en que veamos las primeras luces de la recuperación».

Para lograr este objetivo, que baña de cierto optimismo la ciénaga de malos augurios que todos los analistas realizan sobre la economía española en general y de la andaluza, en particular, el líder del Ejecutivo andaluz anunció un paquete de nuevas medidas de impulso económico que el Consejo de Gobierno aprobará los meses de febrero y mayo. En total, más de 1.500 millones de euros (1.000 millones para inversión; 485 en ayudas para las pymes y 67 millones de incentivos para autónomos). No se trata de una aportación extraordinaria sino de agilizar, según explicó Chaves, inversiones ya contempladas en los Presupuestos de 2009.

Con estas tres acciones serán ya 45 los mecanismos que ha activado la Junta para paliar los efectos de la actual situación económica.

La intervención del presidente de la Junta dio paso a un primer turno de réplica de los portavoces de los tres grupos parlamentarios. Un debate intenso, pero sin apenas frivolidades, porque la gravedad de la situación no invita a veleidades.

Error, no engaño

Javier Arenas y Diego Valderas, máximos dirigentes del PP-A e IUCA, respectivamente, comenzaron sus alocuciones con un reproche similar: el PSOE ha tardado mucho en reconocer la gravedad de la crisis. Una postura común, pero con matices importantes. Arenas acusó a Chaves de mentir sobre la situación para ganar las elecciones autonómicas de febrero de 2008, mientras que Valderas consideró impopio que el presidente de la Junta se presentara como víctima de la crisis, tras 19 años en el poder. Un tiempo en el que, a juicio del dirigente de la coalición de izquierdas, el PSOE ha hecho poco para intentar cambiar el modelo económico de Andalucía.

Chaves, por su parte, asume que erró a la hora de calibrar los efectos de la desaceleración económica que se experimentó en enero de 2008. «Nadie se podía imaginar entonces que nos encontrábamos ante una crisis global jamás conocida», indicó. Lo que sí rechazó de forma tajante es que hubiera mentido a los andaluces. Sus previsiones fallaron, abundó, pero al igual que las de la Comisión Europea, el Gobierno central, los ejecutivos autonómicos y la de los analistas internacionales. Valderas y Arenas también le exigieron que rectificase el Presupuesto para 2009, ante el cambio de presiviones. Chaves sigue considerando que las cuentas que aprobó el Parlamento en diciembre de 2008, con los únicos votos a favor del PSOE, son un instrumento últil para enfrentarse a la crisis.

Los tres partidos sí coincidieron en una cuestión: el desempleo es la consecuencia más dramática de la actual coyuntura. El desencuentro se produjo a la hora de las cifras. Chaves reconoció que en 2008, el paro aumentó en casi el 41%, lo que sitúa la cifra de desempleados en 719.00 y una previsión, para 2009, de 120.000 andaluces más sin trabajo.

PP e IUCA elevan el porcentaje hasta el millón de parados. A su juicio, no se contabiliza a los 'nunca ocupados' ni a los jornaleros agrícolas.

Pactos de La Moncloa

Arenas, durante la sesión de ayer, sólo dejó en una ocasión de censurar al Gobierno socialista. Y fue para ofrecer, un «gran pacto por el empleo» que permita la apertura de la concertación social a la oposición y a las corporaciones locales. «Le hablo de algo parecido a los Pactos de la Moncloa. Este pacto no lo hacemos por usted ni por el PSOE, a los que queremos sustituir. Lo hacemos por todos los andaluces», le espetó Arenas a Chaves.

El presidente de la Junta rechazó la propuesta al considerarla un 'totum revolutum'. Por contra, llamará a los líderes de la oposición para tratar de alcanzar un acuerdo político ante la situación de crisis económica, pero sin «mezclar las cosas».

También se entrevistará, pero por separado, con sindicatos y empresarios, cara a poner las bases del nuevo acuerdo de concertación social. «Cada cosa en su sitio», concretó el presidente de la Junta.

Valderas, por su parte, dio la «bienvenida» al llamamiento del presidente de la Junta «si éste abre los oídos» para escuchar las propuestas que tienen que hacerle su formación, algo que, a su juicio, no hizo en el pleno de ayer. IU confía en que Chaves acepte la necesidad de sustituir el modelo económico vigente por otro más sostenible y solidario.