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Capital Energy renuncia a su planta de biodiésel en La Cabezuela

Zona Franca no descarta la futura obtención de gasóleo ecológico a partir de microalgas

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El grupo Capital Energy ha renunciado a la puesta en marcha de su proyecto de fabricación de biocombustible en el Bajo de la Cabezuela, según informó ayer el presidente de la Autoridad Portuaria de la Bahía de Cádiz (APBC), Rafael Barra. El órgano rector del puerto de la Bahía recibió el martes un escrito de renuncia a la concesión administrativa obtenida en junio para la utilización del terreno en el que la empresa Capital Energy Biofuel iba a construir una planta de producción de biodiésel a partir de aceites vegetales.

La empresa ha eludido realizar ningún comentario respecto a la decisión que ha tomado, así como sobre las otras tres plantas similares que tenía proyectadas en Bilbao, Sevilla y Cartagena. Según Barra, la firma ha alegado dificultades para conseguir la financiación necesaria, pese a que el grupo industrial aseguró hace unos meses que las crisis de su mercado y la financiera no le iban a afectar.

Capital Energy Biofuel es la primera compañía de la reindustrialización que se ha caído del cartel con una renuncia oficial. Cuestionada al respecto, la Junta de Andalucía alegó ayer que desconocía que el grupo promotor hubiera decidido desistir de sus planes industriales en la Bahía. Barra señaló que la concesión del suelo realizada en junio implicaba una tasa anual de ocupación de 360.000 euros, por lo que la firma deberá hacer entrega a la APBC de 180.000 euros por los seis meses en los que ha sido concesionaria de los terrenos hasta su renuncia.

La compañía nació bajo la denominación Diésel Energy y partió con un 55% de capital privado -que procedía del grupo Capital Energy- y un 45% de dineros públicos de la empresa Sepides, de la que es propietaria la Sociedad Estatal de Participaciones Industriales (SEPI), dependiente del Ministerio de Economía y Hacienda. Finalizada la fase de proyecto, la Administración se retiró y la firma pasó íntegramente a manos privadas. La puesta en marcha de este proyecto industrial que iba a generar 40 puestos de trabajo hubiera supuesto la inversión de unos 45 millones de euros. La empresa no había recibido ninguna ayuda a la reindustrialización de las convocadas por Industria ni incentivos por parte de la Junta.

Por otro lado, y respecto al mercado del biodiésel, el delegado de Zona Franca, José de Mier, señaló ayer la importancia que puede tener para Cádiz ser la provincia en la que se desarrolle la tecnología de obtención de gasóleo verde a partir de microalgas. De Mier apuntó que este proyecto no está abandonado.