Zapatero ha recibido a Durao Barroso en La Moncloa. /Efe
crisis económica mundial

Barroso ve «muy útil» la presencia de España en el G-20 por su experiencia en gestión y supervisión financiera

Zapatero recibe en La Moncloa al presidente de la Comisión Europea para exponer sus argumentos para estar en la cita del 15 de noviembre en Washington

MADRID Actualizado: Guardar
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Tras el apoyo recibido en la Cumbre Iberoamericana para que España esté presente en la cumbre financiera del G-20, prevista para el 15 de noviembre en Washington, el Ejecutivo español sigue haciendo gestiones para asegurarse un puesto en la mesa que decidirá el nuevo rumbo de las finanzas mundiales. Con ese objetivo el presidente del Gobierno se ha reunido en Madrid con el presidente de la Comisión Europea. Se trata de un encuentro en La Moncloa que sirve para que José Luis Rodríguez Zapatero exponga a José Manuel Durao Barroso las razones que tiene España para ser invitada a la que se considera la cita financiera más importante de las últimas décadas.

Zapatero y Durao Barroso se han entrevistado en el Palacio de la Moncloa aprovechando la visita a Madrid del presidente de la Comisión Europea para presentar el llamado el Proyecto Editorial Europa. No ha sido un encuentro para convencer al Ejecutivo comunitario porque ya ha quedado claro que es partidario de que España esté presente en Washington el día 15 por su peso político y económico dentro de la comunidad internacional. De momento, no está invitada.

Barroso ha aprovechado su estancia en Madrid para insistir en su apoyo a la participación de España en la cumbre. Entiende que la presencia española sería "muy útil" dada su experiencia en la gestión y en la supervisión financiera.

En la rueda de prensa junto al presidente del Gobierno, Durao Barroso ha explicado que este apoyo no es sólo personal, sino que se trata del apoyo de la propia Comisión Europea y de las instituciones europeas. El presidente de la CE ha subrayado que España es "una de las mayores economías del mundo" y un "ejemplo económico y social en las últimas décadas", además de ser un país "estrechamente ligado a la UE" que "ha sabido jugar de forma inteligente y con vocación de liderazgo".

Durao Barroso ha señalado que estaría "muy satisfecho" y vería "muy útil" que España asistiese a la cumbre de Washington. Zapatero, por su parte, ha insistido en que España debe estar en la cumbre porque "reúne unas cualidades muy singulares" para participar en este encuentro.

El presidente del Gobierno considera que "no hay intención de nadie para que España no esté" en la cumbre, si bien ha querido ser "prudente" en sus declaraciones para lograr el objetivo último de estar en la capital estadounidense.

Cita europea con vistas a la cumbre del G-20

La entrevista de hoy también ha servido para analizar cómo los países de la UE pueden adoptar nuevas medidas de forma coordinada ante la crisis. Como ya explicó el presidente del Gobierno el pasado viernes en El Salvador, la actuación coordinada es la única forma de garantizar su eficacia.

El objetivo de este encuentro en Madrid ha sido compartir unos argumentos y estrategias que volverán a ponerse encima de la mesa en la reunión extraordinaria que los líderes europeos mantendrán en Bruselas el próximo día 7 para fijar su posición con vistas a la cumbre del G-20, en la que se debatirá la reforma del sistema financiero internacional.

Mandatarios europeos como el presidente francés y de turno de la UE, Nicolas Sarkozy, y el primer ministro británico, Gordon Brown, también han manifestado públicamente que son partidarios de la presencia de España en la cumbre.

Al margen de su encuentro con Zapatero, Barroso preside este lunes en Madrid la presentación de las obras que integran el Proyecto Editorial Europa, organizado por el Colegio Libre de Eméritos y la Real Academia de Ciencias Morales y Políticas.