El ministro de Minas y Petróleos de Ecuador, Derlis Palacios./ Efe
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Ecuador suspende las relaciones comerciales con la petrolera hispano-argentina Repsol-YPF

El ministro de Minas y Petróleos anuncia la ruptura al tiempo que informa de un convenio con Petrobras

QUITO Actualizado: Guardar
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El ministro de Minas y Petróleos de Ecuador, Derlis Palacios, ha anunciado la terminación anticipada de las relaciones entre el Estado ecuatoriano y la compañía hispano-argentina Repsol YPF por "fallas" en la negociación en curso para un cambio en la modalidad de los contratos petroleros. El ministro lo ha anunciado en Quito en una rueda de prensa para informar de un convenio con la compañía brasileña Petrobras: "Lastimosamente con Repsol no hemos podido llegar a un acuerdo", "ellos han cambiado constantemente de criterio y no nos han permitido llegar a una negociación".

Palacios -quien ha señalado que la decisión se adoptó hace dos días y se le notificó ayer- habla de "falta de seriedad" por parte de Repsol "para mantener sus compromisos que fueron ya establecidos hace algunos meses, especialmente en la parte económica". Por ello, "el Estado ecuatoriano ha tomado la decisión de terminar la relación laboral con Repsol y hemos dispuesto a Petroecuador que comience la terminación anticipada de los contratos que mantienen en el país".

El presidente del Gobierno español, José Luis Rodríguez Zapatero, se ha mostrado convencido de que Ecuador y Repsol-YPF seguirán negociando. "Esa es la impresión que tengo y que es lo que tienen que hacer tanto el Gobierno de Ecuador como Repsol". Ante la posibilidad de que su Gobierno pueda mediar en este asunto, ha recordado que tanto el ministro de Asuntos Exteriores como el de Industria están hablando con las autoridades ecuatorianas y con los responsables de la empresa.

¿Quién ocupará el lugar de Repsol?

El ministro ecuatoriano ha adelantado que Repsol tendrá que salir del país "apenas se cumplan los procesos legales que se establecen". Según Palacios, se llegaron a acuerdos varias veces, pero los representantes de Repsol "dieron pie atrás", especialmente en la parte económica "alegando que la negociación no era conveniente para ellos cuando ya fue aceptado por su equipo negociador".

Hasta el momento se analiza quién asumirá los campos que Repsol opera en el país. Consultado sobre la posibilidad de que la acción respecto a Repsol pudiese ser reversible, pha sido tajante: "la decisión está tomada". Al hablar de la petrolera francesa Perenco, Palacios ha asegurado, sin ahondar en detalles, que ya se ha llegado a un acuerdo, que esperan suscribirlo la próxima semana.

Con Petrobras, Ecuador ha suscrito un convenio modificatorio de participación para la exploración y explotación de hidrocarburos en el 'Bloque 18'", que tendrá una duración máxima de un año. Para Palacios, la firma del acuerdo con Petrobras demuestra que no existe ningún problema con el Gobierno de Brasil a raíz de la expulsión de la empresa brasileña Odebrecht por fallas estructurales en la central hidroeléctrica San Francisco.

Repsol contradice al Gobierno ecuatoriano

La compañía petrolera hispano-argentina Repsol YPF no considera rotas las relaciones con Ecuador y espera poder cerrar pronto un acuerdo consensuado en las negociaciones que mantiene con el Estado ecuatoriano para modificar las condiciones de sus contratos en el país.

Desde hace unos meses, Repsol, al igual que otras petroleras que operan en Ecuador, renegocia sus contratos, tanto los plazos de las concesiones como el marco impositivo. Repsol tiene derechos mineros sobre tres bloques de exploración en el país -Tivacuno y los denominados bloques 14 y 16-, con una producción de 6,6 millones de barriles en 2007, la mayor parte de ellos procedentes del bloque 16.

La superficie neta de los campos de la petrolera es de 1.225 kilómetros cuadrados y, a 31 de diciembre de 2007, sus reservas probadas de crudo se estimaban en 15,2 millones de barriles. El petróleo es el principal producto de exportación de este país andino que son los ingresos por sus ventas financia alrededor del 35 por ciento del presupuesto general del Estado.